Reflexiones

LA FABULA DEL EGO Y EL ESPIRITU
Dos bebés se encuentran en el útero, confinados en las paredes del seno materno y mantienen una conversación. Para entendernos, a estos gemelos les llamaremos Ego y Espíritu.

Espíritu le dice a Ego:

* Sé que esto va a resultarte difícil de aceptar, pero yo creo de verdad en que hay vida después del nacimiento.

Ego responde:

* No seas ridículo. Mira a tu alrededor. Esto es lo único que hay. ¿Por qué siempre tienes que estar pensando que hay algo mas aparte de esta realidad? Acepta tu destino en la vida. Olvídate de todas esas tonterías de vida después del nacimiento.

Espíritu calla durante un rato, pero su voz interior no le permite permanecer en silencio durante más tiempo.

* Ego, no te enfades, pero tengo algo más que decir. También creo que hay una madre.

* ¡Una madre! – exclama Ego con una carcajada -. ¿Cómo puedes ser tan absurdo? Nunca has visto una madre. ¿Por qué no puedes aceptar que esto es lo Sigue leyendo

La defensa en la ideología religiosa.

Hace un tiempo caí en un abismo de preguntas, donde todo se me había desmoronado y donde nuevos edificios ideológicos se han levantado y ayudado a mirar desde otro nivel todo aquello que creí, sentí, amé y seguí tan fervorosamente por tantos años. “Y sin embargo, gira”.

Y sin embargo existen tantas cosas que jamás soñé existirían.

Estas constantes reflexiones me llevan a pensar en cómo los seres humanos tendemos a defender nuestra postura, a ratos un tanto agresivamente, en la defensa de nuestras ideologías. Esto me llevó a preguntarme, ¿Por qué siempre debemos defender algo?. Por qué ese algo necesita ser defendido?, ¿al defenderlo no está perdiendo validez, valor, credibilidad incluso para con uno mismo?. ¿Por qué debemos ser tan agresivo en la defensa de lo defendido?, ¿será por qué no Sigue leyendo

Reflexiones en silencio

El crepuscular de este maravilloso día que  se vacía en mis ojos a la distancia, me hace perderme en pensamientos que no tienen coherencia, me dejo llevar por paisajes solitarios y dejome caer en acantilados sin tiempo hasta que logro afirmarme de alguna orilla. Sólo me dejan atisbar su profundidad.

El sonido de la radio me trae a de regreso a la “realidad”, al lado, los autos van pisando las calles presurosos, me imagino que tienen la misma urgencia que yo por llegar a sus casas, y me pregunto,  ¿qué les espera a ellos?, qué  vida tienen, son felices, ¡que piensan!, ¿piensan?, seguramente piensan y mucho, y eso no es muy bueno. ¿Tendrán minutos de silencio donde se permitan sentir la vida que palpita en su interior?. ¿Valorarán todo lo que la naturaleza les está entregando tan abierta y generosamente?, sobre todo en este período tan especial de tiempo, ¿o pasarán por el minutero arrastrándose sobre las paredes de edificios, Sigue leyendo

Esclavos?, I, pet goat

Para los ojos que ven más allá de lo aparente…

DMT

DMT es una molecula que se produce en la glándula pineal. Está en todas las plantas, unas más que otras. Busca. El que busca siempre encuentra si está preparado para recibir.

 

 

Reflexiones (Entre el cielo y la tierra)

Entre el cielo y la tierra

En el nocturno palpitar de las mariposas nocturnas, donde brilla la esperanza del mundo, donde todo parece renacer.

 Ahí, donde de alguna manera el ser humano atisba con renovada sabiduría que hay más, más de lo que jamás imaginó.  Allá, en la tibia  llanura del silencio, donde todo es manso y dócil, donde la palabra no crea ni entorpece, donde está la matriz de la comprensión.

 Ahí, entre el cielo y la tierra, donde todo acontece de manera insospechada, lumínica y asombrosa, ahí estoy yo. Dios. Tú. La espiga, la piedra, el lucero.

Ahí…, ahí adentro, en ese palpitar que da la vida está todo.  Ardiendo como en el corazón.

Laguna verde y la navidad

Navidad en Laguna verde

Hace un mes por fin y después de mucho buscar encontré la cabaña que deseé por mucho tiempo. La compré, está perdida entre la espesura y soledad de un bosque y con una hermosa vista al océano que viste nuestra angosta tierra. Por alguna razón, de esas razones que últimamente no tienen mucho argumento en mí ya que todo está cambiando, decidí que lo mejor era pasar una navidad lejos de todo y todos, quería estar sola, el separarme de mis hijos perturbaba mi mundo emocional, pero al mismo tiempo sé que ellos son individuos libres, libres de mí y de sus apegos, materialismos y de las amarras que la mayoría forja a su alrededor. Así que acá estoy, ya pasó la “noche buena” y para mí fue una maravillosa noche. Una navidad diferente a cualquiera anterior, especial y única.

Este lugar ha sido el mejor regalo de navidad y de vida que ha podido llegar, amo la soledad, el silencio y acá está plagado de eso. Amo la naturaleza cuando revienta gajo a gajo a mi alrededor en todas sus magníficas formas, la tierra forjando la piel del silencioso palpitar de este magnífico y vivo planeta (tanto como no logramos siquiera imaginar), el cielo en sus noches limpias, como anoche, noche buena. Me abrigué y quedé por largo rato en cómplice dialogo con cada una de las miles de estrellas que disputaban ser la más brillante, la más locuaz, la más viva. Las estrellas fugaces pasaban por montones, tanto así que se me agotaron los deseos.

Durante todo el fin de semana una enorme águila surcó mi cielo, cerré los ojos e hice un ejercicio que me enseñaron en una antigua escuela. “Metete en el alma del animal que elijas, si el acepta, podrás ver a través de él”, y fui por un instante águila, un enorme, vieja y soberbia águila. Tal vez como soy yo, vieja, viejísima, soberbia, todavía…, y enorme, eso sólo en comprensión. Caminé por los tantos senderos del bosque, respiré los miles de pinos y sentí sus raíces como se unían en una malla invisible a toda la circunferencia de la tierra, Dios, cómo es de viva esta tierra, tan viva como yo, más viva que yo, tan viva que vive fiera en mí.

La verdad, es que comprendí muchas cosas en esta hermosa navidad.

Las oportunidades están abiertas para los que tengan ojos, para despertar a la vida y lo esencial que ella contiene, ojala todos pudieran ver esa maravillosa y esencial verdad.

Feliz navidad, Feliz despertar.

 

Reflexiones

En la última aproximación de tiempo, donde todo es remoto y solitario, donde la exactitud de la existencia se hace única, yace el alma sola, consigo misma y toda su extensión lumínica.

Ahí, en esa amplia, extensa y abrumadora quietud se encuentra con su real grandeza y disminuida (no pequeña) esencia primigenia.

El viento sopla tan fuerte que la limpieza del aire se hace innegable, los pinos susurran secretos de antaño en mis oídos y el mar a lo lejos canta canciones a una luna que juega a ser vestido de la tierra, ésta se niega pero no podrá evitar que en algún momento la vistan de blanco.

Los pájaros son presagio de un nuevo y único tiempo que se avecina, tiempo de despertar de campanas.

 

¿Y qué pasó con 2005YU55?

¿Y qué pasó con 2005 YU55?

Después que la red ardía con especulaciones de que vendría el fin del mundo, otros, que simplemente sería el comienzo de este nuevo cambio, la luz que anunciaba la apertura de la puerta que daría paso al despertar que se producirá el día viernes (11-11-11). Especulaciones, de lo que sí estoy segura, es que nada es ni será igual. Desde hace unos meses la tierra, y el universo cercano están sufriendo cambios y nosotros con ellos. Como leí o escuché en alguna parte una frase que me pareció, además de hermosa, tan cierta, “Dios no está en el Universo, Dios es el universo”, así mismo el ser humano lo es con la tierra y los acontecimientos que ocurren en ella. Creo que no hay que olvidarlo, así seremos un poco más conscientes, y se despertará en nosotros esa humanidad que duerme en la hondura de nuestro ser.

Comparto con ustedes la noticia del famoso asteroide.

 (Tomado de «Mesa redonda»)

“Llegó la hora X y el asteroide gigantesco 2005 YU55, de 400 metros de ancho y casi 300 metros de longitud, pasó sin detenerse a una distancia récord de nuestro planeta. El asteroide se acercó a una distancia de unos 325.000 kilómetros de la Tierra, es decir, que estuvo más cerca que la Luna.

Pese a su proximidad, los expertos aseguran que su trayectoria fue prevista con exactitud y que era imposible que se desviara. No en vano, la NASA excluyó a este cuerpo celeste de su lista de objetos espaciales con peligro potencial.

Lo particular de este objeto espacial es su composición, que refleja muy poca luz, aún menos que el carbón. Por esta razón el asteroide pasó desapercibido para los astrónomos hasta 2005, aunque se trata de un huésped habitual en las áreas cercanas a Marte, Venus y nuestro planeta.

Los científicos aseguran que los acercamientos de cuerpos celestes a la Tierra son relativamente habituales. De hecho, este mismo asteroide estuvo a la misma distancia de nuestro planeta en 1976. La próxima vez que pase Sigue leyendo

El Universo

Para los que aún creen que estamos solos…

Más de alguna vez en alguna conversación social sale el tema de la existencia o forma de existencia de Dios, de si estamos solos  en este pequeño pero amado planeta llamado tierra, de la reencarnación U otros tópicos de este estilo. Cuando la conversación se vuelve aburrida por la estupidez humana de creerse el cuento de adan y eva o simplemente que no hay nada más, yo cierro los ojos y evoco alguna de estas imágenes, y me pregunto cómo alguien puede pensar que un diminuto planeta de un pequeño sistema solar en una galaxia mediana entre miles de millones de galaxias de este solo universo puede tener la audacia de pensar que es el centro o la única criatura del universo, mmmm…. ya no replico, sólo cierro los ojos y pienso, ¡que soberbia, que ignorancia!

Espero disfruten las imágenes. Es interesante pensar que así de complejos, así de perfectos,   es también el ser humano, no lo olvidemos, no desaprovechemos un sólo instante por descubrir la maravilla que hay todavía por explorar en nuestro interior.

¿Si tuviera dos manos, cuánta tierra podría sembrar?

Si tuviera dos ojos, jamás me cansaría de admirar la simplicidad que brota día a día a mi alrededor….

Si tuviera el don de la palabra, jamás dejaría de sembrar en los corazones de los que me rodean.

¿Dónde estamos?

En esta inmensidad que se llama ciudad, donde nos perdemos en nuestros propio mundo, donde de pronto pasamos entre nuestros pares como si no dependieramos unos de otros, cual si fueramos seres totalmente independientes…, y estamos T A N    U N I D O S!!.

Dependemos de la evolución, del crecimiento del quehacer del que tenemos al lado, tanto como del que está a cien kilometros de distancia, dependemos de nuestro planeta como él de nosotros. ¿Entenderemos eso alguna vez?, tal vez, tal vez…es de esperar que no sea demasiado tarde.

«Mientras tanto rozo el caliz de tu cuerpo de arena, y beso el agua que da sosiego a mi hambre, mientras tanto, camino amarrada a tu cintura dormida en mi memoria de antaño, cuando era yo un ángel, de quizas que cielo celeste, o qué marea en descanso» (para no olvidar que  respiro por la palabra)

Una buena alimentación

Somos lo que comemos, esa frase la ocupaba Socrates, así de antiguo y de sabio es este dicho, si queremos despertar interiormente es imposible si no llevamos una alimentación adecuada, si queremos estar sanos, debemos comer adecuadamente, para ello comparto con ustedes una serie de videos que serán de mucha actualidad. Me rio de muchos amigos que se dicen espirituales y luego de hablar largo rato de «temas espirituales» o de tal o cual forma en la que meditan o dicen ayudar al resto y luego se despiden porque van a compartir con algunos amigos una cena o un, como decimos los chilenos «un asadito», no se trata de ser fanáticos ni pasarlo mal, simplemente ser consecuentes y ver lo que metemos en nuestro cuerpo. Hay alimentos que tardan días en digerirse, otros que nos Sigue leyendo

Reflexiones de un despertar

Hay momentos en que la vida se abre ante ti y debes escoger uno de los caminos que te ofrece, si eliges el camino distinto al que venías transitando,  algo cambia, yo elegí ese,  uno que me atemorizaba pero todo en mí me decía que era el correcto. Era abrirme ante una realidad aún más profunda y “loca”, cosa que en general no tomo, he sido muy cauta y racional toda mi vida, odio el fanatismo y la charlatanería, sin embargo  y así mismo, he tenido la necesidad de transitar de la mano de una luz que guie mi vida hacia algún lugar donde mi alma pueda saciar la sed ante la  enorme cantidad de preguntas y cuestionamientos que siempre han rondado mi mente.   Pero esta vez  las cosas se dieron de una forma más abierta, tal vez  obligada, como si ahora no hubiese otra alternativa que seguir adelante ante ese todo que me llamaba.

Todo partió por el anuncio que habría un terremoto el día 27 de Septiembre y para mi mala suerte, justamente mi hermana, mi mejor amiga y otra querida amiga estarían en Estados Unidos ese día,  país en el que se daría el dicho terremoto, que dicho sea de paso se Sigue leyendo

Entre el cielo y la tierra, Patricia Gómez

Del libro «Entre el cielo y la tierra»;

Entre el cielo y la tierra,

Todos los tiempos se mezclan
en líneas cruzadas,
en espacios plenos de materia,
negros, tan negros.

Entre la palabra y el silencio,
se tejen universos completos.

!Ay Dios, sí hay tanta vida…!
Es tanta, que ciega el entendimiento sólo para no ser vista.
(Hay vacíos profundos, tanto, que se tragan el pensamiento
y se llenan de plenitud.)

Reflexiones, Patricia Gómez S.

Ola fugitiva de mis manos, encanto primoroso, ¡ay divino holocausto de la magnífica existencia, de la magnífica existencia toda!

Cómo me sonríes, complaciente y vanidosa en la hondura más extensa del yermo que arrastra mi nostalgia (por la ausencia de mi cielo) y aún así, me libero, cómo me libero hasta de la sombra del infinito pensamiento. Y me torno lirio, ola, tierra…

Tomo el pincel, y el lienzo me absorbe con su piel divina y tersa, los colores brotan insolentes marcando épocas pasadas desde mis manos, y dejo de ser yo, me abandono extasiada y las palabras se mezclan en turbulento y jadeante abrazo en pinceladas de sutil belleza, cuan feliz me hace lo simple, cuan inmensa puedo llegar a ser con el silencio y la vastedad de mí. ¡Cuánto!

Desvaríos de Patricia Gómez

Hace tanto que las palabras no afloran, que casi he olvidado cómo se escribe mi nombre,

y sin embargo, me sangran los dedos con las letras mientras se descuelgan de mi tacto.

La ciudad late más fuerte que nunca en las pupilas de mis días,

las heridas gimen con más fuerza por los ojos del pobre,

la risa truena fuerte  en el oído de esa dicha silenciosa que no comparto con nadie.

Dios, hay tanto que decir y sin embargo, se me secan las palabras en las yagas de la sordera.

 Imagen: Fuegos, W. Blake

Cuentos indígenas

Sabiduría Indígena

Un viejo cacique de una tribu estaba teniendo una charla con sus nietos acerca de la vida.
Él les dijo:
“¡Una gran pelea está ocurriendo dentro de mí!… ¡es entre dos lobos!
“Uno de los lobos es maldad, temor, ira, envidia, dolor, rencor, avaricia, rabia, arrogancia, culpa, resentimiento, inferioridad, mentiras, orgullo, egolatría, competencia, superioridad.
“El otro es Bondad, Alegría, Paz, Amor, Esperanza, Serenidad, Humildad, Dulzura, Generosidad, Benevolencia, Amistad, Empatía, Verdad, Compasión y Fe.
Esta misma pelea está ocurriendo dentro de ustedes y dentro de todos los seres de la tierra.
Lo pensaron por un minuto y uno de los niños le preguntó a su abuelo:
“¿Y cuál de los lobos crees que ganará?”

El viejo cacique respondió, simplemente… “El que alimentes….”

Reflexiones sobre, humanos, universos y otras cosas.

En el siglo V algunos filósofos / astrónomos, sospechaban que la tierra podría ser redonda, aún cuando el 99,99% de los otros seres humanos pensaba que era cuadrada, varios siglos más adelante confirmaron que sí era redonda, pero se mantuvo la idea que el sol era el centro del universo, al menos no pensaban que era la tierra, toda una odisea tomando en cuenta que no contaban más que con algo de matemáticas (para ser honestros bastante avanzadas, al menos los griegos) y buenos ojos.  

Ya estamos en el siglo XXI y hemos caminado un poco más, ya sabemos que el sol no es el centro del universo si no una estrella de tamaño medio que ocupa un lugar no muy privilegiado de una galaxia llamada, vía láctea, donde hay miles de millones de otras estrellas como ella; ¡¡Bien!!.

Avanzando otro poco, se especula que hay más de un universo, (gran logro tomando en cuenta que hasta hace sólo unos pocos siglos atrás, 45 mil que tiene la tierra y dos mil más o menos que existe el hombre, pensábamos que todos esos  millares de puntos brillantes giraban en torno a ella) se ha descubierto que posiblemente existe no uno, sino que  multi universos, ósea muchos universos que están unidos por agujeros de gusano, pero que en realidad, es el mismo universo que tiene espacios vacíos y gracias a esos espacios, aparentemente vacíos, forman una infinidad de universos, Ufff…

Tenemos además de hoyos negros, que se devoran hasta los pensamientos, blancos, que  los escupen. Andrómeda y la Vía Láctea están en guerra, ¿tal vez lleguemos a saber quién se comerá a quién?, (eso, si queda  algún humano vivo en esta vuelta de la tierra).  Que viene un cometa, bueno…, varios, pero uno pasará muy cerca en Noviembre, terriblemente cerca cabe señalar, pero las noticias dicen que no nos preocupemos, “no afectará a la tierra así que podemos estar tranquilos”, ¡gracias! digo mientras sonrío.

Qué más, ahh, sí por supuesto, los extraterrestres, ¿existirán?, mi abuelita dice que no, no sé si creerle, tal vez en un universo de miles de millones de galaxias debemos ser los únicos, si somos tan inteligentes, lo demostramos día a día (1914 / 1939 / 2001..etc.), puede ser que  seamos los únicos habitantes, ¿por qué no?, acabo de ver Alicia en el país de las maravillas, si ella pudo despertar en un sueño porque yo no puedo creer que somos los únicos en este maravilloso multi-universo, que cabe señalar, que la mayor parte de él es de materia oscura, ósea, se supone que no hay nada, pero como suele suceder, está repleto de materia no visible.

Qué más…, ah sí, que Obama lucharía por una igualdad racial, económica y social, todos teníamos tanta fe…, (ingenuos) que con Piñera vendría el cambio, por esa frase fui corriendo a votar por él. Todavía me duelen las rodillas del porrazo que me di. Que los políticos se postulan por una verdadera “vocación de servicio” y no por la cantidad de plata que se echan día a día en los bolsillos y por supuesto, por aquello que el ser humano es capaz de vender hasta el alma;  ¡PODER!.

Y la vida sigue, algunos pensando y ocupando mucha razón. Otros viviendo como si la caída de la bolsa o el dólar fuera lo más importante en sus vidas, otros, arreglando los CV (cambio de jefatura), los menos, tratando de comprender lo que está vedado a los ojos, cegado al entendimiento, oculto a la razón.

¿Y yo…?, me siento tan ignorante como una gota de agua en un vasto océano de ilusión.  

Creer en la fuerza de tu interior.

Algo está cambiando. Ese es el título de un post en un blog que me gusta leer, me hizo pensar. Siempre algo puede cambiar, está en nosotros que suceda, siempre hay algo que puede mejorar, hacerse más llevadero, más armónico, más humano pero en el sentido más elevado de esa tan manoseada palabra. Humano.

Hemos ido perdiendo la humanidad en nuestra vida, dejamos de silenciarnos, y no detenemos la razón, hemos ido dejando de escuchar lo que nos grita el corazón. Halito divino que nos mantiene aprendiendo en este tan maltratado y poco valorado planeta. Hoy, como tantos otros momentos doy un nuevo paso, uno tal vez más alto, o más profundo, pero sin duda, uno que me acerca al reposo de mi interior y de lo que realmente es  verdadero.

Cuando se pierde la esperanza en un mañana distinto, uno que te llene de real añoranza en que ha de darse aquello por lo que has soñado y luchado siempre. No importa, no importa nada lo que te puedan decir “otros”, y en otros incluyo a tantos…, lo que sí importa es no perder la absoluta convicción de que todo tiene un sentido, los caminos de pronto se hacen inestables, inseguros y esa inseguridad ronda tu alma, pero en el fondo, en la hondura más extensa de tu alma, siempre está lo real.

Entre el cielo y la tierra

Quise escribirle al amor, no pude, el cielo se me vino encima.

Al ojo,  la tierra y su gente. El universo me hizo tira las sienes.

Quise escribir a un amante. Enanas blancas,  hoyos de gusano y  cuásares  me enamoraron.

Me quedé sin palabras ante este macro universo que me devoró las entrañas.

Ante lo inminente de Dios en él, en mí, en todos.

Quise ser cotidiana. No pude, los miles de caminos me cortaron la razón.  

«Entre el cielo y la tierra» 

Benedictinos y el retiro

Después de estar vagando por más o menos dos semanas entre nubes grises donde todo era confuso, y el temor a un mañana catastrófico me estaba hiriendo la esperanza, tomé una decisión. Necesitaba aislarme. Me vine donde  a veces recurro a pesar de no ser católica, a los Curas Benedictinos.

Escribí y el dulce padre Beno me contestó enseguida brindándome la esperada acogida.  Así son ellos. Me recibieron como siempre, con una mirada limpia, una sonrisa llana y esa generosidad que hace tan bien al alma.

Me encerré en mi pequeña celda desde el viernes. Cerré la puerta, deje el bolso sobre la silla y miré por la ventana, había un liquidámbar  sencillamente hermoso, estaba muriendo con lentitud y sobrecogimiento, sus hojas ensangrentadas brillaban de gozo ante ese cambio inminente que llegaría a su vida, ¿tal vez pensaba en el nuevo nacimiento que le esperaba dentro de unos meses?.  Luego guardé mis cosas, saqué mi computador y escribí un rato, todo lo que mis pobres ojos cansados soportaron. Abrí la ropa de cama y me metí en ella.

La primera noche fue extraña, mientras trataba de conciliar el sueño  me puse a pensar en los personajes de mi novela y de alguna manera se compadecieron de mí,  ya que salieron de las  páginas para venir a hacerme compañía, ellos también viven en celdas como estas. Apagué las luces,  prendí la vela, y ahí estábamos, ellos, las tantas almas que habían estado antes que yo en esa misma cama,  mis pensamientos y yo. Descorrí el velo del tiempo y me sobrecogió lo tanto que pude comprender. Mis pesares se hicieron más intensos, mis alegrías más Sigue leyendo

Misterios de la astrofísica

Un regalo que el autor nos hace. Un libro que encierra años de estudio y dedicación, ahora lo pueden bajar pinchando la imagen. Espero que lo disfruten.

MISTERIOS DE LA ASTROFÍSICA

RAFAEL LÓPEZ-GUERRERO

(Costado izquierdo del link donde está el archivo, dice «ARCHIVO», pinchar y luego pinchar en «descargar archivo)

Reflexiones

Si pudiera

Si pudiera sostener el silencio en una línea delgada de luz,  amarrarlo a uno de los dedos de Dios para que nunca se rompa. Si pudiera hacer que el entendimiento crezca con raíces centenarias en mi alma, en la de los que amo, en la de aquellos que no conozco pero dependen de mí, tanto como yo de ellos.

Llevo días rumiando como un animal palabras que se me caen de bruces desde un cielo que está en todas partes, y luego, como una piedra en un lago se hunden en la sordera inconsciente mi parloteo mental.

Llevo días queriendo ser montaña solitaria, cobijar desde lejos a los que la vida ha puesto en mi camino y he de proteger, llevo días aislándome del mundo y éste, incansable me traga con voracidad.

Y el agua corre en un manantial  diáfano,  el sol nos cobija generoso y la tierra, ahh, ella no deja de fecundarnos en cada paso que damos.

El tráfico

El taco se hizo insoportable, no me quedó más remedio que elegir un buen repertorio de música e irme por el cerro. Había olvidado, (cuan rápidamente olvidamos) lo bueno que es tomar los caminos alternativos, esos que te acercan un poco más al centro mismo de tus pensamientos y al vacío de la emoción.

Saqué el pie del acelerador y dejé  que los autos que iban adelante se alejaran un poco, el que me seguía, iba bastante lento, muchas curvas, camino estrecho, no fue difícil perderlo. Inserté el CD de Denez Prigent, hay un tema en particular que me gusta muchísimo y era justo el que necesitaba hoy día. Abrí la ventana y me dejé llevar. A medida que iba subiendo, las luces de una parte de Santiago parecían pequeñas luciérnagas que nada significaban, eran eso…,  luces lejanas a mi presente.

Fueron veinte minutos de real disfrute y pensé…,  bendito taco!

Buscando respuestas

«El deseo de cuestionar la vida viene de la propia vida, de esa parte de la vida que todavía está escondida»

Jean Klein

(me pareció sobervia esta frase, por eso se las regalo)

¿Por qué pensamos?, ¿que es el pensamiento? somos nosotros parte de ese pensamiento, o simplemente se pasea en nuestra mente como un elemento más de los tantos que nos conforman? ¿podemos pensar en algo que no hayamos pensado con anterioridad y por lo tanto no existe para nosotros?, como traeremos una imagen que no es conocida por nuestra mente, una que jamás hemos visto, por lo tanto desconocida?

Son tantas las preguntas que nacen de ese sólo y único elemento, y hay tantos…, ]¿Qué es el temor, que es la imaginación, por qué deseamos…., por qué algunos seres humanos se preguntan tanto y otros tan poco… por qué algunos sufren desde su nacimiento y otros lo tienen todo…? hay tanto que preguntarse. Tanto que buscar.

Krishnamurti dice: » La verdad es una tierra sin senderos. El hombre no puede acercarse a ella a través de ninguna organización, de ninguna secta, dogma, sacerdote o ritual, ni a través de algún conocimiento filosófico o técnica psicológica. Tiene que encontrarla a través del espejo de las relaciones, a través de los contenidos de su propia mente, de la observación y no a través del análisis intelectual o la disección introspectiva. El hombre ha construido en sí mismo imágenes como una valla de seguridad-religiosas, políticas, personales. Estas se manifiestan en forma de símbolos, ideas, creencias. La carga de estas imágenes domina el pensamiento del hombre, sus relaciones y su vida diaria. Estas imágenes son la causa de nuestros problemas ya que dividen a los hombres. Su percepción de la vida está moldeada por conceptos ya establecidos en su mente. El contenido de su conciencia es su entera existencia. Este contenido es común en toda la humanidad. La individualidad Sigue leyendo

¿Me amas?

Vamos a dejar el silencio que repose un momento colgando de una rama mientras el viejo roble murmura cansado que está sediento, le doy a beber un poco de agua que apilo en una hoja de gunnera. Luego doy  un paseo por las notas de este maravilloso concierto de Tchaicovsky mientras pienso.

 

– Sí, por supuesto que te amo, eres el amor de mi vida, ¿lo sabes verdad?… – dice él mientras la mira con una mirada deslavada-
– ¿Estas seguro que me amas de verdad?, dime mi amor, ¿realmente me amas tanto?. – Contesta ella mirándolo con la mirada encendida y llena de esperanza.
– Sí, por supuesto, no tengo ninguna duda.
– Entonces, dime cielo, ¿qué harías por mí? Sigue leyendo

Quisiera

Quisiera, que las palabras fueran livianas para que no cortaran con su filo el firmamento…, las formas etéreas, para sostener su luz entre mis manos. Quisiera ser en los abismos de mi  tacto, en el latido de una boca de mil años, en los infinitos trazos de algún cielo plagado de hoyos negros.

¡Como quisiera ser la llama que arde en el ceno de alguna matriz milenaria!, en el origen, en los puntos que marcan cada nuevo comienzo.

En el último retorno. En el primero.

Quisiera amarrarme a los segundos de un tiempo que no existe, en la necesidad que crea el universo, en la NECESIDAD de Dios , en esta necesidad de Dios de ser en TODO, como és la del Todo, de ser en la caricia  de su mano.

Quisiera, quisiera…, dejar de ser humana para no tener límites.

Silencios

Hay tiempos en los que no hay mucho que decir, a veces sucede, y cuando no es importante o sirve de algo lo dicho, es mejor guardar silencio…, eso es lo que estoy haciendo, sin embargo miro, miro y escucho el palpitar de mi vida y de los que de alguna manera y forma me acompañan, escucho silenciosamente los latidos de la tierra y de las formas que moran en ella, aún cuando el tiempo se ha detenido.

La mesa está tan silenciosa como yo, sobre ella dejo una pluma de la cual resbala una pequeña mancha de tinta que se esparce milimétricamente dibujando una huella tan delgada que podría desaparecer en tan solo una fracción del tiempo, ahhh el tiempo!!, si existiera el tiempo…

La ventana me regala un rayo de luz, se resbalan unas pelusas imperceptibles a la mirada cotidiana, o esa mirada que tal vez no tiene ganas de detenerse en las cosas “sin importancia”.

Me pego por unos segundos en las ranuras de la madera, es una mesa vieja de madera que adoro, es una mesa que sostiene el paso del tiempo sin inmutarse, es una mesa llena de silencios, de tiempo inexistente y de nudos que parecen arboles vivos.

Días de enfermedad

Vengo ya de regreso de estar casi una semana en la clínica, operaciones que no esperas, eventos difíciles que te hacen replantearte todo y a la vez te dejan   inerte.

Ya han pasado algunos días y estoy recuperándome, recuperando la mirada en alto y la esperanza viva.

Los días pasaron lentos, como entre dos mundos, si no fuera por “mi” ventana que daba a un bello jardín donde se mecían con benevolencia unos álamos gigantes, de alegres racimos de un verde intenso  que Sigue leyendo

El renacer de 33 mineros.

«Estamos viviendo momentos históricos, estamos a punto que se nos salga el corazón por la boca»,  dice el comentarista mientras todos los chilenos estamos pegados frente a una pantalla de televisor para ver, cómo por fin salen uno a uno los treinta y tres hombres que estuvieron sesenta y nueve días hundidos en las profundidades de la tierra. Aparece el primero, Florencio Avalos, todos aplauden, suenan las bocinas en las Sigue leyendo

Una noche cualquiera

 

Es tarde, y por no sé qué razón pinche el blog, hace tanto que no escribo, tal vez hoy lo hice porque  ha sido un día especial, siempre lo son si uno mira con detenimiento.

Recibí una carta de una querida amiga que me ha dejado reflexionando, al terminarla, logró  que la quiera un poco más por  cosas…, cosas de personas que son un universo, uno en el cual  damos  gracias por transitar en él, por ser parte de ese maravilloso destiempo, lleno de misterios, de inmensidad, de tanto que dar, tanto que contar, tanto para decir.

 Luego, mis dolores de cabeza están cesando, es un alivio, llevo una semana sumida en una de esas jaquecas que no te sueltan y por último,  la noche esta singularmente bella, plagada de estrellada, la brisa corre fresca, tanto que me hizo sentir una con ella. De alguna manera este último tiempo tengo la sensación que  me estoy descamando como cuando una lombriz deja de serlo para ser mariposa, no por lo hermosa, sino por lo completa.  Me gusta el dolor del cambio, me hace tomar consciencia que existe y cuando llega esa consciencia a materializarse, soy feliz, inmensamente feliz por el sólo hecho de estar un poco más completa que hace un día atrás.

Nostalgia, Liz Duran

Una deliciosa reflexión de la autora (Amiga  y poeta Mexicana) Liz Duran.

«Ésto viscoso y dulce que escurre de mi corazón como un cielo resquebrajado, con su vago olor a sufrimiento y maravilla, es lo que a veces no puedo seguir guardando en los rincones donde queremos ocultar al dolor. Puedo sentir cómo escurre inundando mis husos y mis venas. Está cubierto de oro viejo pero su resplandor no cancela su origen, que es la pena. Aún así, qué magnífico tener esas goteras que dejan escapar esencias de nostalgia, de amor, de vida…
Como el llanto de un bebé, como los ojos de los cervatillos, la mansedumbre de los perros: así de cierto es que para tener estos tesoros es necesario haber amado con ternura de gorrión y con caricias de pantera. Haber vivido los momentos más dulces, las ácidas palabras de abandono, la fiera dentellada: soledad.

Poder amar con la cabeza llena de pájaros y flores, el corazón galopando en las nubes. Con los dedos crispados, con labios escocidos. Haber permanecido pendiendo de un recuerdo como hilo de cometa, haber quemado los pulmones con el aire punzante de la desazón: haber amado.

Ese es el pasaporte hacia este punto en el tiempo, hacia este lento deslizar de lo viscoso y dulce que de vez en cuando mana del corazón como un quebrado cielo.»

Un día cualquiera…

Las luna está radiante  y pletórica, los arboles dibujan un marco perfecto. Las personas caminan absortas, los autos se alejan de prisa y la pequeña ciudad que guarda la principal plaza de empresas de Santiago se queda silente. Miro a los tantos perros vagos que viven en sus calles y siento tanta tristeza…, se acurrucan en alguna esquina discreta o bajo un sillón de una de las tantas parada de buses, tal vez pensarán que algunas de las personas que hacen las largas filas esperando el transantiago se compadezcan y les tirén algún pedazo de pan o restos de una pastilla que quedó rezagada en un bolsillo olvidado. Yo sigo mi viaje despacio, tengo los ojos trémulos, no puedo olvidar a los dos perros nuevos que fueron abandonados hoy, eran tan pequeños, ahora, cuando ya está oscuro y la luna llena las calles con su presencia, todavía daban vueltas, lucían lánguidos, como si presintieran el terrible futuro que les espera.

Esa imagen y los juegos de palabras que a veces hacen trampas mortales me dejaron partida.  Sí, después de un amanecer radiante el  día se me quebró y quedé partida en dos, una parte de mí se recobró y miró, vio desde afuera y una vez más tuva consciencia, luego pensé  “Patty, cuando entenderás, hay sólo dos vías, el dolor o la comprensión”, siempre lo olvido.

Cada vez que puedo les recuerdo a mis hijos, “no olviden, para despertar hay sólo dos caminos”. Pero de pronto, cuando el mundo me atrapa con sus matices y formas, con sus aromas y superficialidades, con la aparente belleza de las imágenes, me duermo tan profundamente que viene un golpe rancio y parte mi sueño de cuajo.  

Existen las casualidades?

Hoy llegué a casa después de estar fuera de Santiago por el fin de semana, mis hijos se quedaron acá, tenían sus panoramas, ¡adolecentes y esa maravillosa juventud…!

Después de ordenar algunas cosas prendí mi computador y se asomó una hoja de Word que quedó abierta, era un ensayo corto de un tema por demás interesante, rápidamente me di cuenta que no fue pedido por la universidad, no,   era un escrito de esos que salen por necesidad interior. Partía así.

“NO EXISTEN LAS CASUALIDADES, POR NICOLAS B.

”A continuación demostraré mediante un ejemplo que las casualidades no existen y que todo está en movimiento, en cada segundo, en  cada instante…”

Lo leí completo, interesada y prestando toda la atención que merecía, quedé sorprendida. Él estudia Ing. Comercial, sin entrar en detalles, no es la carrera de sus sueños pero la ha caminado con altura de miras. Él en realidad tiene alma de idealista, buscador, no sé…, de esos seres que tiene que encontrar sentido y valor a las cosas. Está aprendiendo a ver y buscar una realidad que le de paz, comete errores, está creciendo y mientras lo hace, necesita caminar el trecho Sigue leyendo

Amo y me aman

Estoy enamorada de mi boca, de mis dedos y ojos, de mi tacto…, amo mis curvas y mi fuego, mis ríos caudalosos, mis pensamientos…, los amo y me aman, soy tan de ellos como ellos son míos.
Amo todo lo que toco, lo que abraza mi existencia, mis grandes hombres, mis tantos muertos, (muchos, todavía caminan a mi lado), las mujeres que me acompañan en este viaje, los animales, ¡a todos! sus ojos inocentes, sus patas cariñosas, su silencio.
Amo lo que no conozco porque es un desafío, lo que he tocado porque me llena de olores y sensaciones, lo que esta por llegar, porque me hace desear el mañana.
Amo profundamente mi alma, es ella quien encandila, la que alumbra a quienes me acompañan, amo sus almas porque me ayudan a caminar…

Amo por sobre todo el silencio que me muestra tantas palabras, a ellas…, a ellas simplemente ¡tanto las amo!. De tanto amor que tengo, de tanto sentirlo, mi cuerpo entero esta cambiando, mi faz no tiene nombre, mis manos tacto, mis ojos…, se están vistiendo de eternidades.

No se cuanto camino me quede ni cuanto amor quepa en mis manos o siquiera si existiré mañana, pero con lo que tengo hoy, con tanto que me amo y aman…, ¡por Dios, que me basta!.

El amor, y el todo.

Palabras de amor a un amor que ama.

En el tiempo que arrastra el aire que me da vida has de aprender a  sostener mi fuerza, mi quietud  y mi tempestad, soy todo eso…, y también soy la nada más profunda, desaparezco tanto en mí misma, que me cuesta reencontrarme.

Has de saber,  que a ratos soy un océano violento y profundo que se desgrana en cada gota que lo contiene, que bailo todo lleno de vida y en cada baile y movimiento arrastro con dulzura a los que amo sobre mi lomo profundo. En otros, soy sumisa como ese prado que en quieto movimiento alimenta a miles de seres, donde crece la hierba, donde la tierra se hace amigable. Soy la misma naturaleza brotando, creciendo y muriendo para poder renacer, sin muerte no hay nacimiento.

Te llevo en mi sangre, y como ella, corres por mis venas, me das vida y la quitas con la ausencia que escribe tu boca en el viento. Eres mis palabras a un desconocido, mi lengua tibia en una esquina del silencio, la pupila encendida cuando te mira al sembrarme, eres, lo que no conozco, y las cuatro letras que sueña el mundo.

Dentro de mí crece la flor, se dispersan los ríos por mis venas, y el universo se expande en mis ilimitados espacios, soy lo que soy, no menos que un mendrugo de pan, ni más que el opíparo manjar que reposa en tu mesa. Soy el amor que se deshace en tu lecho, el dolor que se retuerce en tu vientre, el aire que pasa por tu garganta.

Soy la que te ama, la que muere en tu cuerpo, aquella que te hace perderte en el verde que marca el camino a mi alma. Soy las que me han habitado tantas veces, las que seguirán, por no sé cuánto más…

El latido de Dios en la yemas de tus dedos, el silencioso misterio que mueres por develar, los tantos extranjeros de planeta que habitan esta tierra llena de promesas, soy…, soy tú y ¡no lo ves!.

Soy el que lee y se deshace en trémulo palpitar por las letras pensando…, pensando….

Soy la matriz, el cáliz, y la siembra que votas inconsciente en tu hembra alguna noche, el desvelo y la ilusión, la risa que muere en la comisura de tu boca cuando en secreto me besas, cuando sueñas que estas despierto. Mmmm… soy, la semilla que brota en cada nueva vida, y la cruz que marca su muerte. Soy, YO SOY, lo que sueñas y más, mucho más de lo que imaginas. Sin tan solo tuvieras ojos para verme….te darías cuenta que soy tú.

Desvaríos

La vida y sus vaivenes.

Corre esta vida llevándonos en su grupa, como pequeños siervos perdidos sin saber a dónde van tan de prisa, corren en un sueño que no descansa de soñar.  Y en ese sueño eterno canta mi alma.

¡Corre!, corre vida llévame en tu grupa de nube hasta la última estrella, déjame acariciar sus ojos de siglos, deja que corra por su piel de luz hasta que la haga mía. Corre vida, corre tras mis pasos sedientos de estelas, hambrientos de estelas…, de estelas azules.

Corre por las venas de la tierra, hacedle cosquillas al Dios que levanta tu ojo y en quieta mansedumbre te muestra el suyo.

¡Ay! Añoranza de eones, como avanza el tiempo, en ese minuto de sueño, que no existe más que en el loca carrera de un reloj de arena mientras sueña. Corre, corre alma mía por los dedos de Dios.

Reflexiones, los días…

Los días…

Cada día me convenzo más de lo maravillosa que es la vida, nos llena de alegría en un momento inesperado y en otro,  nos aplasta como moscas cuando la ceguera se hace insoportable y no vemos lo que está ahí, ahí como un elefante blanco gritándonos, aquello que es esencial, lo que realmente cuenta.

Los días se han sucedido estas últimas semanas intensos, por decir lo menos, ha pasado de todo, bueno, malo en apariencia y normal, también en apariencia. Pero eso no tiene importancia ya, lentamente, como si fuera un caracol que va dejando su estela he ido retomando el camino y viendo, sí  viendo lo esencial!!, tal vez alguno se pregunte y ¿qué es lo esencial?, para mí, te podría decir  que lo esencial es aquello que queda cuando has sacado todo lo demás, cuando desaparece la forma, cuando  desaparece el deseo, cuando sacas ese rostro y queda sólo el sentimiento desnudo, eso es esencial, cuando ves más allá de la forma, cuando sacas el hielo del pasto que ha cubierto estos días nuestro Santiago y ves el frío en los ojos de los que esperan que pase un bus, cuando te das cuenta por primera vez de los muchos perros que han estado por días durante estas mañanas enrollados de tal forma,  que casi desaparece para no morir de frío, cuando vez en la niña que sirve el café, que hay cansancio, cuando la miras ¡y te das cuenta por primera vez que nunca antes miraste dentro de sus ojos por estar ensimismados en los tuyos!.

Cuando comienzas a ver que una pequeña chispa se está asomando en la mirada del que era ciego, ciego de vanidad y sobervia, comienzas a tener esperanza en que alguna vez ese ser humano despertará. Cuando presientes que tu corazón saltará de golpe después de mil años de sueño profundo, sólo…, porque recordaste la verdadera razón del por qué estas acá.  

El amor

El amor que no se comprende.

A raís de un interesantísimo comentario que nos deja nuestro amigo Dani, me atrevo a tocar someramente este tema, por supuesto siempre aclarando, que es una opinión muy personal y no representa nada más que eso, mi humilde opinión.

Mi estimado amigo, ¿quieres hablar del amor?… complejo tema este.

Se ha dicho que Dios nos creo por amor, cosa que discrepo completamente, tal vez y si me dan ganas más adelante y se justifique,  te explique porque ahora no viene al caso.

El amor no se siente ni es tomable o es posible dejarlo, no se elige ni se piensa. El amor no es algo que nazca del pensamiento, por lo tanto cuando realmente se ama no se está sujeto a todas las amarras que la mente nos tiende. No podemos sentir celos, no existe el sentido de posesión de esa persona, no se busca poseerlo, no se le exige nada. El amor, ese real y verdadero,  simplemente ES en nosotros, como el aire, como la sangre, como las vidas que corren en Sigue leyendo

Desvaríos

Hay tanto que decir,  tanto que escribir… y se me acaban las palabras.

Hay tanto que recordar, y la memoria se me quedó en otra vida.

Hay tanto que hacer, sólo espero que no se me acabe el tiempo ya que

 hay días en que quedo ciega.

Premio a un blog

Hoy ando nostálgica, tal vez del tiempo y las personas. Quizás, sólo nostálgica del ruido y voces que no leeré o ya no leo.  

Hace unos días, varios ya…, mi estimado amigo Luis Irles,  me avisó que dejaba un regalo en su blog, para el mío. Me fui corriendo a buscarlo. Lo traje y guardé en un  rincón de tesoros, sólo porque él me lo había dado, un hombre al Sigue leyendo

Días de claridad

Entre esa ventana vacía, y el mundo que se agita a mi lado, hay tanto…

 

Entre esa ventana vacía, y el mundo que se agita a mi lado, hay tanto…

Hoy fue uno de esos días, aquellos que son raramente completos, sutilmente completos.

Te das cuenta de ello cuando te levantas y corres con letanía y sin mucha esperanza  las cortinas que cierran la luz del día, (ignorantes  del poder que viene en ella),  haces a un lado la somnolencia que se arrastra por tu cuerpo como una ola mansa y miras, miras como se abre todo ante ti, como en una película mágica ves el real significado de las cosas, la importancia de cada una de las personas que habitan y caminan por y en tu vida.

Las jerarquías con las que cada ser humano mueve las piezas de su juego de ajedrez, los horizontes, lo tanto que viviste, los dolores, lo aprendido, ¡lo tanto que te amaron!, (como si fueras única).

Ves, como si estuviera parado frente a ti, el placer de haber escalado la más alta de las montañas, donde  el goce golpeó tu rostro como una ráfaga de tibio viento, donde llegaste a la cumbre donde mora el dolor, aquel que no te deja respirar, aquella cima donde clavaste  la bandera del gozo, el de la dicha más completa.

Lo curioso de todo…, es que tal como la luz llega en chispazos, así de rápido se va.

Pero aún así, permanece la dicha de que por un instante de develada consciencia miraste, y el camino se abrió  ante ti con matices nuevos, viste vaciarse el sol en cada una de las plantas que dieron movimiento a tu vida, miraste las copas que contuvieron como aguas vivas a todo y todos los que amas con sus dulces imperfecciones y sus tristes falencias.  Viste lo tanto que has recibido, lo que has dado, lo que eres. Luego,  te das vuelta y emprendes una vez más el día creyendo mantener esa visión, crees que permanecerá en ti esa armonía y comprensión que abrieron por un instante tus ojos. Los ojos con los que vemos aquello que no se toca. Y a pesar de ello, hoy fue un día de rara claridad.

El Principito…

Domesticarse….

Entonces apareció el zorro:
-¡Buenos días! -dijo el zorro.
-¡Buenos días! -respondió cortésmente el principito que se volvió pero no vio nada.
-Estoy aquí, bajo el manzano -dijo la voz.
-¿Quién eres tú? -preguntó el principito-. ¡Qué bonito eres!
-Soy un zorro -dijo el zorro.
-Ven a jugar conmigo -le propuso el principito-, ¡estoy tan triste!
-No puedo jugar contigo -dijo el zorro-, no estoy domesticado.
-¡Ah, perdón! -dijo el principito.
Pero después de una breve reflexión, añadió: Sigue leyendo

La felicidad y el presente

La felicidad.

Ahh, ¡felicidad! Amante efímera y ansiada…, me pregunto ¿sabemos aprovechar realmente y con total consciencia esos instantes en que llega a nuestras manos y se nos da completamente?

Sería fantástico no cometer dos veces un mismo error, sería perfecto aprender a disfrutar lo que nos regala la vida ¡como si fuera el mejor regalo del mundo!, tomar consciencia que  esa única experiencia pudiera cambiar totalmente nuestras historia si la dejamos caminarnos por la piel,  sería grandioso aprender a no vivir en el mañana ni lamentarse del pasado, estar, ¡estar con todo! en ese preciso instante, en ese único instante, sería maravilloso, jamás arrepentirnos de lo hecho, sólo por aquello que  no tuvimos el valor…

Sería perfecto, sonreír con serenidad cuando miramos atrás, porque no quedó nada por decir o hacer, sería perfecto, sólo sonreír con serenidad mientras caminamos por la vida por tener el alma en paz. Felicidad, milagroso instante que marcas tantos millones de puntos en la arquitectura de mi existencia.

El silencio interior

El silencio interior.

 Hoy, el día amaneció, a pesar de ser invierno, ¡hermoso!, sin embargo y  a pesar de ello, estaba convulsionada, con mucho trabajo, mucho movimiento interior, llena de vida, de esa vida que excede una aparente realidad, me pasa a veces, recordé un día que  llegué a casa y uno de mis hijos al verme llegar contenta pero acelerada me dice con toda naturalidad, “oye,  estas media híper ventílala ahh” , que razón tenía.

 La verdad es que en “esos días” uno se siente bien, plena y contenta, dando ordenes, moviendo cosas y situaciones, inmersa en el mundo como si fueras una partícula atómica en plena actividad. Sin embargo, estas completamente desordenada y no consciente de lo que eres y lo que debes ser. Al pasar las horas y detenerme, detenerme en mí misma, logré tomar  consciencia de lo grato que es tener silencio interior, ese que logras sólo cuando te alejas de ti misma y logras verte en toda tu gran magnitud, en toda tu belleza y en todos tus defectos y ves, ves todo claro y silente, y comprendes lo que no se ve cuando se está danzando en la rueda de la vida.

 Una vez un querido maestro me dijo, escribe, escribe cuando sientas que tienes algo, una pequeña cantidad de luz, escríbela para que no olvides el momento, escribe para que esa magnífica, distinta e intransferible sensación o comprensión de ese momento, no puedas olvidarlo, para que no se escape de nuestra consciencia como lo hace una pluma cuando es llevada por la brisa, imperceptible y casi sin causar ruido.

The Crowded River – Runrig

«Eres el poemaque no ha nacido» (Binah)

 

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Diario

El Sábado me fui al cajón del Maipo, necesitaba hacer algunas cosas además de cargar las pilas para la semana. Me acompañaron un par de amigas, ellas querían cosechar rosa mosqueta, (una de ellas hace una mermelada fantástica), así, mientras ellas peleaban con el fruto ya que tiene un montón de pequeñas espinas que luego no tienes como sacarlas,  yo me dediqué a explorar. Recordé mis veranos en el sur, específicamente en Conguillio,  solía perderme por horas en esos cerros, parecía que toda la naturaleza me hablaba. Decidí subir un poco más, de pronto los  arbustos dieron paso a unos hermosos eucaliptos, apenas los vi me acordé de Milla, como no, van para ella estas pocas fotos.

 

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JEAN MICHEL JARRE

No recuerdo si te conté el despertar de la música sintetizada en mi vida, pero bueno, esto es algo. Vivía en Pirque, no habían casas cerca por lo tanto tenía todo el cielo cayendose en mis ojos. En las noches de verano ponía un CD de Jarre a todo el volumen que me permitiera mi familia, sin que me echaran de la casa, luego salía  y me tiraba en el pasto cerca de unos eucaliptos y ahí me quedaba tirada como una lagartija descifrando el universo al compas de un «oxigeno2». El manto negro que se desplegaba ante mí con sus miles de pequeños puntos luminosos se convertían primero en orificios, luego se iban extendiendo hasta formar pequeños tuneles que conectaban a otros universos y así en una escala interminable que no dejaba de sorprenderme comencé a necesitar tocar esa música y de alguna manera acercarme a un conocimiento más acabado de ese universo. Lamentablemente llegué sólo al nivel de «aficionado», pero al menos con eso, pude saciar mi sed.

El Pato, en ese tiempo mi profe de teclado y como es un genio, sacó las partituras de mucha de la música de jarre para poder enseñarmela, todavía tengo esas partituras gastadas y llenas de historia. Por lo tanto, Jarre fue mi primer amor, ese que me hizo abrir las puertas de un estilo de música que ya nunca más abandoné.

Diario

Hace un par de noches viví algo que siempre pensé ocurriría al resto, eventos que te chochan por lo invasivo; me robaron el auto de la puerta de mi casa… ya no tiene importancia el hecho en sí, las cosas materiales vienen y van y nunca se sabe por qué ocurren, simplemente pasó y hay que esperar que viene de regreso.

El punto importante es esa sensación horrible que te queda después, cuando tratas de cerrar los ojos y comienzan a aparecer imágenes, sensaciones, sentimientos que no te gustan. Notas reacciones en las personas que te rodean, analizas lo que recibes…, lo que das. Lo que puede un acto que no debiera ser tan importante, violentar tu vida.

Cómo de una manera extraña ese pequeño incidente provoca un movimiento que puede hacer que el cauce por donde transitan tus días, tome un leve giro, uno que te remueva para darte otra visión o perspectiva. Cómo cada pequeño incidente, a veces, puede producir un cambio total en tu cielo.

La vida sigue, el auto apareció (no muy bien, pero apareció)  y el río por donde fluyen los días se va abriendo… y a pesar de todo eso…, me siento inmensamente feliz porque aún tengo los ojos abiertos.