Quiero todo.

Quiero todo…,
Romper el horizonte con la pupila que abriga el alma.
Desaparecer en la tarde del ocaso, aquel que bordea el dorado pliegue de mis dedos.

Quiero disgregarme en la sangre que me mueve, suave y tenue,  como un musgo quieto.
Sin que nadie lo note. Apacible y quieto.

Saborear la vejez de la tierra, el gutural sonido de la noche.
Quiero ser en la tormenta mientras va hilando las estrellas.
Morir salvajemente en el tacto de la mano.
¡Acariciar de lomo a lomo el firmamento!

Quiero…, arrastrarme infinita por la huella que dejan los ríos en la tierra,
resurgir en ahogado lamento a través de este universo.

Exprimir la luz de mis entrañas.
Amamantar la raíz de mis bosques moribundos.
Asesinar con mis pupilas al profano, al carnicero.

Quiero,
Deslizarme arisca a través de mis cabellos
Rosar con mi pupila ebria el arcoíris eterno.

Todo, quiero todo.
Incluso la nada deshaciéndose en mis venas.

Patricia Gómez

 

La tierra

Esas ganas que me laten en la carne…,
se me arrancan de las manos,
de los ojos, ¡¡del alma!!.

Esa urgencia que se me anidó en el corazón.

Pasó así, sin más, de un día pa´ otro,
en un momento cualquiera,
como cuando amaso el pan,
prendo leña pa´ darle vida al fuego,
o cabalgo una bestia ¡a puro pelo!
Sólo pa´sentir como va trepando por mis piernas,
esa, su alma de fiera. Universo en desvelo.

Ay esas ganas…,
que me laten en la carne. !En el alma!, por derramarme en la tierra.

Y ser raíz y copa.  Piedra, canela.

FINAL PARTE I  DE ESTE BLOG

«Entre el cielo y la tierra»

PATRICIA GOMEZ

La poesía se rompe titilante en mi pupila
y queda mi alma desmembrada
ante el tibio sonsonete de su canto.

Y nace de la nada una luz tan inefable,
que quema mi cuerpo de cisne moribundo,
tornándome en rojo cardenal
de un jardín de rezos en descanso.

Y una luz que ciega mi ceguera, se abre ante mí.
Toda ella insondable y misteriosa, ¡toda pura!,
Toda, amor. Toda tuya, toda…, toda infatigable,
plena de designios, toda entera y más allá del tiempo

Y me lleno de un deslumbre tal,
que me inmolo en los cálices de Dios.

Y es tu cuerpo, el templo de mis manos,
Y es tu piel, avena de mi boca .
Y soy en ti, ayy amor, soy enteramente
en el tacto de tus dedos.
Y es tu alma, el eco de mi alma.

¿Eres? / Moonlight on a lotus

¿ERES?

¿Eres?

¿Eres la semilla en descanso
que espera paciente
partirse entre mis labios?

Tal vez, un dibujo de kandinski en mi memoria,
o un solfeo en manos de Vivaldi.
¿Dime, eres ese roble erguido Sigue leyendo

María Rilke

 

     «Aunque alguien viniera con su alma más inocente, más inmediata, y encontrara su referencia en los mismos astros, aunque me soportara a pesar de mi torpeza y rigidez y conservara su pura e infalible disposición para conmigo; aun cuando el rayo de su amor viniera a estrellarse diez veces en la turbia y densa superficie de mi universo submarino, todavía sería yo capaz (lo sé ahora) de empobrecerlo en el seno de la abundancia de su ayuda renovada sin cesar, de encerrarlo en el irrespirable dominio de una ausencia total de ternura, hasta el punto en que, vuelto inaplicable su auxilio, pasará el mismo de la plenitud a la marchitez, hasta dar en una siniestra decadencia.»

Maria Rilke. (Extracto de una de sus cartas a María Lou)

 

Me quedo con una de sus frases del diario intimo y recién descubierto donde plasma con una deslumbrante profundidad y a la vez desolación sus vivencias.

24 de agosto de 1902

’…No tengo ninguna relación con las personas, no formo parte de ningún grupo, de ningún movimiento: mi grupo soy yo y soy un movimiento que va hacia el interior. Así vivo…’

Cuevas de las manos cañadón.

El amor

El amor que no se comprende.

A raís de un interesantísimo comentario que nos deja nuestro amigo Dani, me atrevo a tocar someramente este tema, por supuesto siempre aclarando, que es una opinión muy personal y no representa nada más que eso, mi humilde opinión.

Mi estimado amigo, ¿quieres hablar del amor?… complejo tema este.

Se ha dicho que Dios nos creo por amor, cosa que discrepo completamente, tal vez y si me dan ganas más adelante y se justifique,  te explique porque ahora no viene al caso.

El amor no se siente ni es tomable o es posible dejarlo, no se elige ni se piensa. El amor no es algo que nazca del pensamiento, por lo tanto cuando realmente se ama no se está sujeto a todas las amarras que la mente nos tiende. No podemos sentir celos, no existe el sentido de posesión de esa persona, no se busca poseerlo, no se le exige nada. El amor, ese real y verdadero,  simplemente ES en nosotros, como el aire, como la sangre, como las vidas que corren en Sigue leyendo

Socorro Carranco

A TODOS LOS CHILENOS DEL MUNDO (mayo-2010)
Socorro Carranco / autora Mexicana que despierta toda mi admiración y cariño.
 
Vengo de la noche inconmensurable
Buscando todos los caminos de la tierra
Para que  me lleven sin cansancio, invencible
con las odas de las cosas rotas.
 
Vengo de la profundidad del  tiempo
Ahí, sólo me conoce el silencio nocturno de la vida
Para que puedan las estrellas lucir su brillo.
 Ahora veo el sol en la grandeza de Neruda

Y puedo sentarme en la orilla de la Isla Negra
Y caminar los días más alegres de mi vida Sigue leyendo

¿Por qué escribo?

¿Por qué escribo?

Escribo para el agua
que corre hambrienta por la tierra,
por los dioses que habitan en mis cerros,
(aquellos que se empinan en mi sangre,
partiéndome los días con su espera).

Escribo,
por aquello que veo y me duele de la vida,
por el dolor que camina cabizbajo por mi lado,
por los pobres, ¡los podridamente pobres!,
aquellos que lloran por migajas de alimento,
los que rompen la palabra con los ojos,
los que mueren en la misma tierra nuestra,
pero solos…, ¡Dios, abísmantemente solos!
¿y el mundo? los mira indiferente,
sentado desde un palco de ironía.

Escribo por aquellos,
que están secos de esperanza.
Con el llanto derretido en las pupilas.
Con el miedo lacerándoles el alma.

Escribo para ti, si, para ti
que juegas con mi piel sin saberla de tus labios,
jamás canela de tus aguas, nunca miel de tus panales.
Y aún así, escribo para ti. Sigue leyendo

Delmira Agustini

Amo la poesía de Delmiri Agustini porque  tiene la particularidad de pasearse como una Diosa por los abismos de cada ángulo y profundidad que contiene  la palabra,  al menos para mí, eso convierte a un poeta en un gran poeta.  Tiene la mística encerrada en versos a los que sólo unos pocos podrán siquiera acercarse,  el erotismo más finamente dibujado, tanto que casi se pierde en una imagen tenue y bien balanceada, la belleza que se asoma en las figuras que se disfrazan de cotidianeidad, el sentimiento punzante de abandono y dolor, así como el de exaltación y locura.

Me gusta su obra porque se pasea con desenfreno por horizontes que pocos logran tocar, me gusta, porque la haría mía sólo por el placer de haber pensado, que pude pasearme tan libremente y sin pudor, por espacios a los que sólo a unos pocos se les da la oportunidad de presentir.

Ceguera

Me abismo en una rara ceguera luminosa,
un astro, casi un alma, me ha velado la Vida.
¿Se ha prendido en mí como brillante mariposa,
o en su disco de luz he quedado prendida?
No sé…
Rara ceguera que me borras el mundo,
estrella, casi alma, con que asciendo o me hundo.

¡Dame tu luz y vélame eternamente el mundo!

Del libro, Calices  

¿Acaso fue en un marco de ilusión,
en el profundo espejo del deseo,
o fue divina y simplemente en vida
que yo te vi velar mi sueño la otra noche?

En mi alcoba agrandada de soledad y miedo,
taciturno a mi lado apareciste
como un hongo gigante, muerto y vivo,
brotado en los rincones de la noche
húmedos de silencio,
y engrasados de sombra y soledad.

Te inclinabas a mí supremamente,
como a la copa de cristal de un lago
sobre el mantel de fuego del desierto; Sigue leyendo

Enigma, Universos

Me lleno de ti

Me lleno de ti Universo,
del crepitar del silencio,
del latido de la noche,
¡Ay, como me lleno!
 
Se deshace la luz en el lecho
y quedo pleno de ella,
así como del árbol y la espiga,
como del rocío que amamanta mi desvelo.

Ahh, Universo, me lleno tanto de ti,
de tus dedos descubiertos,
de la matriz del Dios
que te sostiene en su seno.

¡Me lleno de ti,
de ti me lleno hasta
que desborda mi piel…, de ti!

De los colores nuevos,
que vas inventando en cada nuevo nacimiento.
De lo inmutable de tu grandeza,
de ti me lleno hasta saciar esa sed de ti
que tengo, desde antes del tiempo.

Ay!, como rebalsa mi alma
de tu inmutable grandeza.

Poesía infantil universal

Para Millina pequeña, Gorok y tantos niños que me gustaría abrazar…

EL ROMANCE DE LA NIÑA NEGRA.  (Luis Cané)

(Con este, llorabamos cada vez que mi madre lo recitaba, ¡¡que terrible!!)

Toda vestida de blanco,
almidonada y compuesta,
en la puerta de su casa
estaba la niña negra.

Un erguido moño blanco
decoraba su cabeza; Sigue leyendo

Sonetos

Otra más de la saga… «me gusta la poesía»

Esta será dedicada a los Sonetos. Veamos que es un soneto; son poemas escritos con cuatro estrofas (catorce versos endecasílabos) y cada verso de once sílabas métricas (también hay de doce y catorce). Se distribuyen en dos cuartetos (cuatro versos) y dos tercetos (tres versos) y tienen un juego rítmico variable, puede ser ABBA ABBA y CDC DCD o CDE CDE, por supuesto que con el tiempo estas reglas se han ido rompiendo, llamándose sonetos blancos, incluso a poemas que de Sonetos sólo conservan los catorce versos, como el que va al final escrito por Pablo Neruda.

Creo que la gracia de este tipo de poesía, la «trabajada» es que el poeta debe mantener la armonía y belleza de lo dicho, pero haciendo calzar cada una de estas piezas en el juego poético. Buen desafío para los que nos llamamos poetas.

Un verso libre o blanco como también se le denomina, es un verso que no tiene reglas, puede ser escrito con la cantidad de versos que se quiera, sin control métrico ni restricciones en la rima.

Mmmm… bastante más fácil o no?…

Acá, algunos de los que más me gustan. Elijan…

NECESITO DE TI (Rafael de Leon)

Necesito de ti, de tu presencia,
de tu alegre locura enamorada.
No soporto que agobie mi morada
la penumbra sin labios de tu ausencia.

Necesito de ti, de tu clemencia,
de la furia de luz de tu mirada;
esa roja y tremenda llamarada
que me impones, amor, de penitencia.

Necesito tus riendas de cordura
y aunque a veces tu orgullo me tortura Sigue leyendo

Cerraron sus ojos / G. A. Becker

Amigándonos con la poesía, especialmente dedicado a Karen, Milla y JCJurado

Iré dejando algunas entradas que tendrán relación directa, con la poesía y algunos de los poemas que lograron despertar mi amor por la poesía.

Partiremos con un poema de Becker que es capaz de mostrar de una forma bella y al mismo tiempo de desgarradora crudeza lo que es la muerte. Cuando lo leí por primera vez no pude menos que sentirme profundamente acongojada, y a la vez, admirar el arte poético.

No es fácil escribir una poesía que contenga más de noventa seis versos, todo escritos en seis sílabas métricas (hexasílabo), ni una más ni una menos y, que sea capaz de no perder su fuerza, la armonía y esa coherencia poética que lo hace comprensible al lector. (Por supuesto que se han escrito otros poemas mucho más extensos,  pero quise traer este porque en lo personal, me gusta muchísimo.)

Cerraron sus ojos…

Cerraron sus ojos
que aún tenía abiertos,
taparon su cara
con un blanco lienzo,
y unos sollozando,
otros en silencio,
de la triste alcoba
todos se salieron.

La luz que en un vaso
ardía en el suelo,
al muro arrojaba
la sombra del lecho,
y entre aquella sombra Sigue leyendo 

Soneto de Oscar Hahn

«Si hija de mi amor mi muerte fuese…»

Quevedo

Gladiolos rojos de sangrantes plumas,
lenguas del campo, llamas olorosas,
de las olas azules, amorosas,
cartas os llegan, pálidas espumas.

Flotan sobre las olas de las brumas,
epístolas de polen numerosas,

Sigue leyendo

UNA POETA SIN FRONTERA

«Goroka

Esa senda, la mía, la que yo recorría  incansables las horas, inquebrantable el alma y entonces esa senda, que ungía cada tarde y cada madrugada y era bálsamo y aún hiedra y era algo más que un todo, que la brisa y el soplo de la vida, que el rumor de la playa o el rubor de la ferviente ira incontenida, de la mar que angosta los recuerdos.  Esa senda que a tientas sí existía, y que es apenas nada, porque de nada vivo.»
Me dieron ganas de leerte, de recorrer por pedazos la tierra que fecunda tu palabra, me dieron ganas de que estuvieras acà, tal vez cerca y poder mirarte y tirar palarbas al viento, versos, historias como las que pintas en tus lienzos. Es un agrado ser tu amiga Goroka, tal vez algún minuto de estos tantos universos que amamos nos acerquen un poco. Un abrazo para ti, no tenìa donde decirte que me encantó este texto.

Dime, que tal…

¿DIME, QUE TAL SI….? 

Qué tal si mañana…, el tiempo se rompe.
Qué tal si yo soy un sueño
de esos, que corren los días
y por breves instantes me vuelvo real.

Qué tal si sólo por hoy imaginas…
que estoy a tu lado bordando tus dedos
aplastando furiosa el tedioso silencio.

Qué tal…, si fuera ésta, tu última vida,
¿Qué tal si no hay otra?,
¿Qué tal, si no está San Pedro, Sigue leyendo

Geraro Talens

Reseña biográfica

Poeta, ensayista y traductor español nacido en Tarifa, Cádiz, en 1946.

Se educó en Granada donde cursó el bachillerato y por cuya Universidad se licenció en Filosofía y Letras en 1968. Posteriormente se doctoró en Filología Románica por la misma universidad, con una tesis sobre Luis Cernuda.

Es un miembro destacado de la Generación del 70, autor de varios libros de ensayo sobre Cervantes, Quevedo, Espronceda y Cernuda entre otros, traductor de poetas como Beckett, Holderin, Hesse y Rilke, y de importantes Sigue leyendo

Tertulias Literarias

Ayer jueves 13 de noviembre, se llevó a cabo la primera de varias tertulias literarias abiertas, estuvo estupenda y nos dejó profundamente satisfechos. Esta idea se gestó junto al poeta Manuel Andros, queríamos abrir un espacio donde se pueda juntar la poesía con un público que no estuviera, necesariamente, relacionado con ella. Es imperativo abrir las páginas de nuestra poesía nuevamente, de otra manera esta irá muriendo irremediablemente en la soledad de unas pocas plumas.
En esta época, los jóvenes exponentes han tomado como grito libertario la poesía, a través de ella expresan sus desacuerdos sociales, humanos, políticos y morales, lo que me parece fantástico, pero ¿qué pasa con los adultos?, que ocurre con esa parte de nuestra sociedad que ya esta sumergida en la cotidianidad de la vida, aceptando con una brutal pasividad los desatinos y desigualdades de estos tiempos. ¿Dónde se esta dando cabida a la sensibilidad, que con un grito depresivo inunda nuestra clases sociales más ahogadas?. Sigue leyendo

Vrujan Vosganian

Vrujan Vosganian (poeta y político Rumano), me sorprendió la poesía de este hombre, realmente la vida nunca deja de sorprenderme…

Hierogamia

Estoy en la cabecera de mi cama
velándome a mí mismo
inmortal y redondo como un grano de trigo
como la serpiente Kundalini mordiéndose la cola
como un anillo en tu dedo

La voz del ángel en la hierba

la caída en pecado viene acompañada de signos
el mundo que andas buscando está más allá de los signos
me dijo mi ángel de la guarda
el fluir de la sangre en la venas es lo más silencioso que existe
pero también el silencio es un signo
las manzanas rojas anuncian que la cosecha está próxima
los cascos de los caballos dejan en el suelo mojado por la lluvia
las huellas de su marcha insomne
ojera tras ojera
lo que esta más allá de los signos es tan puro
que ninguna llama podría consumirlo
en aquel lugar, mi hermosa señora,
todos los signos se cubren, toda huella desaparece,
tan limpio de pecado es su paso por la hierba.

Poesía de Maria Rilke

Poemas tempranos

Ésta es la nostalgia: morar en la onda
y no tener patria en el tiempo.
Y éstos son los deseos: quedos diálogos
de las horas cotidianas con la eternidad.

Y eso es la vida. Hasta que un ayer
suba la hora más solitaria de todas,
la que sonriendo, distinta a sus hermanas,
guarda silencio en presencia de lo eterno.



No puedes esperar hasta que Dios llegue a ti
y te diga: yo soy
un Dios que declara su poder
carece de sentido.
Tienes que saber que Dios sopla a través de ti
desde el comienzo,
y si tu pecho arde y nada denota,
entonces está Dios obrando en ti

Omar Khayyan

Qué es el hombre todo si no sus pequeños momentos de claridad, què nos llevamos consigo salvo nuestras obras y acciones, son éstas las que quedan flotando tras las cenizas que dejo nuestro cuerpo ya marchito.

Encontré este hermoso poema que espero les guste tanto como a mì.

Omar Khayyan

Me pregunto qué poseo verdaderamente.
Me pregunto qué subsistirá de mí después de mi muerte.
Nuestra vida es breve como un incendio. Llamas que se
olvidan, cenizas que el viento dispersa: un hombre ha vivido.

****

«¿Temes lo que puede traerte
el mañana?
No te adhieras a nada,
no interrogues a los libros ni a tu prójimo.
Ten confianza; de otro modo,
el infortunio no dejará de justificar tus aprehensiones.

No te preocupes por el ayer:
ha pasado…
No te angusties por el mañana:
aún no llega…
Vive, pues, sin nostalgia ni esperanza:
tu única posesión es el instante.»

Rancagua, Luis Robinson Venegas

Rancagua.

La estación del Recuerdo.
Después de tanto tiempo ido,
a Rancagua regresé emocionado
con el pensamiento de imágenes repleto
dispuesto a enfrentar aquel pasado,
saturado de escenas desvaídas
borrosas,ambiguas, deslavadas,
que el yerto fuego que en mí había
a duras penas revivía Sigue leyendo

Tengo

Tengo

Tengo la piel abierta
de cara al cielo,
empinada en el deseo,
cercada por el alma.

(Las puertas que me encierran
en esta tierra desierta
ya no tienen bisagras.)

Tu y Yo

Entre el cielo y la tierra…

 

Estamos tu y yo.

Yo…, completa, plena, inmensa.

Esperando, esperando la mirada que

desentierre mi quietud.

Tú, en algún rincón del silencio.

 

 

(Libro, Entre el cielo y la Tierra)

Tagore

I
Siento que en mí palpitan todas las estrellas.
El mundo corre por mi vida como un hermoso río.
Las flores han pasado a trav�s e mi sangre.
Y toda la primavera de aguas y jardines se alza
de mi coraz�n como un humo azul, y el aliento
de todas las cosas canta como una flauta en mis
sienes.

II
Cuando la tierra se adormece llego a tu puerta.
En lo alto callan las estrellas y tengo miedo de cantar.
Velando espero hasta que tu sombra pasa por el balcón
de la noche. Entonces regreso silencioso y lleno de ti.
Luego, en la canto a la orilla del camino.
El aire matinal escucha temblando y las flores vuelven hacia mí su rostro de pétalos.
Los viajeros se detienen de pronto para mirarme frente a frente:

es como si mi canto a cada uno le llamara por su nombre.

Walt Whitman

Cosmos

» Quién contiene a la diversidad y es la Naturaleza
quién es la amplitud de la tierra y la rudeza y sexualidad de la tierra
y la gran caridad de la tierra, y también el equilibrio
quién no ha dirigido en vano su mirada por las ventanas de los ojos
o cuyo cerebro no ha dado en vano audiencia a sus mensajeros
quién contiene a los creyentes y a los incrédulos
quién es el amante más majestuoso
quién, hombre o mujer, posee debidamente su trinidad de realismo
de espiritualidad y de lo estético o intelectual
quién después de haber considerado su cuerpo
encuentra que todos sus órganos y sus partes son buenos
quién, hombre o mujer, con la teoría de la tierra y de su cuerpo
comprende por sutiles analogías todas las otras teorías
la teoría de una ciudad, de un poema
y de la vasta política de los Estados
quién cree no sólo en nuestro globo con su sol y su luna
sino en los otros globos con sus soles y sus lunas
quién hombre o mujer, al construir su casa
no para un día sino para la eternidad
ve a las razas, épocas, efemérides, generaciones.
El pasado, el futuro, morar allí, como el espacio
indisolublemente juntos. «

Nostalgia

NOSTALGIA (Juan Ramón Jiménez)

Al fin nos hallaremos. Las temblorosas manos
apretarán, suaves, la dicha conseguida,
por un sendero solo, muy lejos de los vanos
cuidados que ahora inquietan la fe de nuestra vida.

Las ramas de los sauces mojados y amarillos
nos rozarán las frentes. En la arena perlada,
verbenas llenas de agua, de cálices sencillos,
ornarán la indolente paz de nuestra pisada.

Mi brazo rodeará tu mimosa cintura,
tú dejarás caer en mi hombro tu cabeza,
¡y el ideal vendrá entre la tarde pura,
a envolver nuestro amor en su eterna belleza!

Entre el cielo y la tierra

Pintura tomada de http://www.albatique.com/albatiqu/albatica.html

 

(De mi libro)

Entre el cielo y la tierra

 

Arden mis manos, arde mi femineidad toda,
elevándose en los crepúsculos,
alzándose indómita en mi sangre.
yY soy todas las hembras del mundo,
y soy yo, toda yo, más intima y profunda
que el cielo que me respira en cada latido
que le robo a hurtadillas, a Dios.

 

El Violin de Yanko

Mi madre me arrullaba con poemas como este, de ahí el amor a la literatura y a la poesía, este es uno de los poemas que me hacía soñar, espero les guste.

Madre la selva canta,
y canta el bosque y canta la llanura,
y el roble que a las nubes se levanta,
y la flor que se dobla en la espesura,
y canta y juega el viento en el camino,
y en el rubio trigal las amapolas,
y en el cauce el arrollo cristalino, Sigue leyendo

Sri Aurobindo

Siguiendo con una busqueda de la poesía Indú me encuentro con un escritor que me sorprende en su claridad espiritual. En cada uno de sus versos deja ver «lo encontrado», el sentir de cada paso silencioso en un sendero donde no caminan dos, solo el UNO, solo ese. Hombre poliglato, aprende a hablar Aleman solo para poder leer a Goethe, Italiano para leer a Dante, español para Calderon.Espero lo disfruten. (He llegado a la conclusión que basta leer algo de un autor para saber si él, es el indicado para ese momento, para lo que andamos buscando, por ello dejo solo posteo algo, así cada uno irá encontrando un sin fin de alternativas mientras camina)

 

Sri Aurobindo
El pájaro azul

» Soy pájaro del Hacedor
en su azul más primigenio
-divinamente alto y claro- Sigue leyendo

¿Si te amo?

Un regalo para todos los enamorados.

¿Si te amo?

¿Me preguntas si te amo?, me ruborizo de pensar
en la forma en que te amo,
me avergüenzo de los pensamientos
que lascivos se pasean por mi mente,
¿y tu me preguntas si te amo?

¡Ay Dios! si más que el tiempo
y que la esencia …,
más aún que la distancia que me aleja,
más que todas las muertes
que nos llevan la ventaja,
más mucho más que mil vidas y vivencias
¡¡Yo te amo…!!

Amarte más…, ¡no puedo!,
no me cabe más amor del que me mueve.
Me diluyo, me disuelvo entre tus manos, Sigue leyendo

Delmira Agustini

Nocturno

Engarzado en la noche el lago de tu alma,
diríase una tela de cristal y de calma
tramada por las grandes arañas del desvelo.

Nata de agua lustral en vaso de alabastros;
espejo de pureza que abrillantas los astros
y reflejas la cima de la Vida en un cielo…
Yo soy el cisne errante de los sangrientos rastros,
voy manchando los lagos y remontando el vuelo.

 

Hay Días en que…

La semana pasada se realizó el lanzamiento del poemario, «Hay días…, en que» publicado por editorial Edysis, libro que compartimos en autoría con Socorro Carranco, poetisa Mexicana,  No había tenido tiempo de comentarlo acá, pero es un evento qeu me ha hecho muy feliz. Nació despues de conocer a Socorro en el encuentro de mujeres poetas en el país de las nubes, y con la cual se crearon lazos literarios y afectivos muy fuertes, ella es una mujer exepcional, con la cual me siento honrada de participar en este libro. Comparto con Uds. esta alegría.

 

 

No se como habitarte, Mario Aguilar

!!No sé cómo habitarte!!
Hace tanto que el páramo me contiene!
Que el espacio me ha invadido!
Que el tiempo late sin cambiar los días!
Adonde miro, la distancia aúlla
y el viento corre lento.., sin apuro!
Desde este mangrullo se ven muy a lo lejos,
algunas razones y esperanzas,
apenas disimuladas.

Nada nuevo se me ocurre,
y lo quisiera, para inaugurártelo!
Para asentar allí la fiesta alta de la vez primera
y del encuentro!

Habré de esperarte silencioso…
Hoy te toca a ti!
En algún lugar podrías construirme
tu puerta y tu ventana a donde lleguen,
y puedan invadirte estas ganas de habitarte!!!

Mario Aguilar – Bs.As. – Argentina – 2005

Hoy leí este hermoso poema, es curioso como una sola palabra nos despierta por completo, me sucedió con este poema, creo que esa palabra resume exactamente lo que me gustaría decir. Tal vez me la robe para hacer un poema, lo más probable es que no salga tan bueno, en todo caso, lo medular de esta reflexión es para maravillarme una vez más por la fuerza de la palabra, como siempre me dice Raúl Allende, la palabra es lo que mantiene vivo a los seres humanos, vivimos, aprendemos, y nos mantenemos por ella. Si no fuera por ti, palabra mía, tal vez sería muda de pensamientos, cómo me gustaría habitarte por siempre. 

 

 

 

AZRAEL, AMADO NERVO

Azrael, abre tu ala negra, y honda,
cobíjeme su palio sin medida,
y que a su abrigo bienechor se esconda
la incurable tristeza de mi vida.

Azrael, ángel bíblico, ángel fuerte,
ángel de redención, ángel sombrío,
ya es tiempo que consagres a la muerte
mi cerebro sin luz: altar vacío…

Azrael, mi esperanza es una enferma;
ya tramonta mi fe; llegó el ocaso,
ven, ahora es preciso que yo duerma…
¿Morir…, dormir…, dormir…? ¡Soñar acaso!

Maria Rilke (de nuevo)

Estaba releyendo algo de Maria Rilke, es increíble como se nos pasan por alto seres humanos de tanta valía, de tanta profundidad, palabras que por sueltas y digo sueltas porque vuelan entre los dedos de los días, a veces, no se ven. Observen que belleza hay en cada uno de estos versos, ¡¡que profundidad!!

La colección de poemas reunidos bajo este título general apareció por Navidad de 1897, y fueron escritos en los años 1896 y 1897. Más tarde se añadieron cinco poemas (1894-18979 en la edición de los llamados Primeros Poemas, en 1913, en la cual se incluyeron también los poemas láricos de Praga, seguidos de Coronado sueño y Adviento. Damos sólo el poema “Adviento” por su carácter representativo. El ciclo consta de 79 poemas. Se ha señalado en ellos la inluencia de Jacobsen.

Poemas tempranos
(1899)
Ésta es la nostalgia: morar en la onda
y no tener patria en el tiempo.
Y éstos son los deseos: quedos diálogos
de las horas cotidianas con la eternidad
.

Y eso es la vida. Hasta que de un ayer
suba la hora más solitaria de todas,
la que sonriendo, distinta a sus hermanas,
guarde silencio en presencia de lo eterno
.
Berlín-Wilmersdorf, 3 de noviembre de 1897.

No puedes esperar hasta que Dios llegue a ti
y te diga: yo soy
Un Dios que declara su poder
carece de sentido.
Tienes que saber que Dios sopla a través de ti
desde el comienzo,
y si tu pecho arde y nada denota,
entones está Dios obrando en ti.
Sin fecha (1898-1899).

Me provocas

 Me provoca tu beso
y el grueso de tus labios.
Me provoca tu sonrisa,
y esa mirada infinita
que se escapa de tus ojos,
al solo imaginarlos.
Me provocan tu boca
haciendo piruetas en mi vientre,
y tus dedos suaves
bordándome lirios en la espalda.

Me provoca tu pecho ¡todo entero
derramándose en el mío!,
tu vejez exquisita plena
de experiencia
silenciando mi palabra.

Me provoca tu delirio y tu silencio,
tus manos, todas ellas me provocan
¡no sabes cuanto!

Ay cariño, si todo tú…,
toda entera me provocas,
tanto…, que haces
desbordar mi alma
de tanto provocarme.

 

Mis muertos

Hoy, una noche partida,
de color y tacto,
vinieron a visitarme,
de la mano y juntos…,
mis tantos muertos.

En faz trémula,
cansina y delgada,
la de mi madre,
¡tan blanca!
Con ojos hondos,
como lagunas tristes…,
con cuerpos delgados,
sin sombra, ni huella.

Caminaban mustios,
como perdidos,
vagando
por quizas que mundos,
tal vez mundos sin llanto.

Los miro y me miran
así como perdidos,
caminan de mi mano
como si no existieran,
como si jamás hubiesen muerto.

Si pidieras

Si pidieras…,
Iría a descubrir tierras al escamo
de un cielo sin sombra,
viviría de palabras,
y besos tejidos,
de esos que se arrugan
en las esquinas de tu boca.

Sembraría con mis ojos
¡todos los verdes
en una tierra austera!,
pariría junto a ti, ¡árboles eternos!,
de esos gigantes, nobles,
para que trepemos al cielo…,
a recoger esperanza.
(Sólo para cuando escasee.)

Iría en las tardes de frío,
a hurtadillas al infierno,
a robar vasijas de fuego
(para que nunca se desmaye el nuestro),
haría de mi piel, abrigo de tu invierno,
sería la gota que riega tus semillas,
el arado de tus dedos,
el sendero de tus pensamientos.

Si pidieras, si tan sólo pidieras
sería la palabra no parida
la gota que corre por tu cuerpo,
las cuerdas que rompes con tu mano,
cuando en silencio me piensas.

Sería el negro que queman tus ojos
cuando escalas por mis cimas.
La nieve, el lago, el río…, ¡el llanto!,
sería lo que imaginas, lo que no existe,
sería…lo que no han soñado tus manos,
lo que en silencio, fantasea tu mente.

Si pidieras,
si tan solo pidieras …,
te abriría en silencio el Universo.

En que lugar?

He tomando prestado para la primera estrofa unos versos de Sabines que son capaces de inspirar cualquier palabra por muda que sea.

«¿En qué lugar, en dónde, a qué deshoras
me dirás que te amo? Esto es urgente
porque la eternidad se nos acaba…»

No será que mueras en el sueño de tenerme,
muera el día o muera antes de nacida la esperanza,
¿no ves amor?, esto es urgente,
puede que muera yo mañana,
que la tarde se escarche bajo el sol
o nos llevé el temor de sabernos…,
antes de llegada la palabra.

Corre, antes que la eternidad se nos acabe.

.

El Norte de Chile, bajo un Ala.

picos-y-lagunas.JPG   picos-de-cerro.JPG   laguna1.JPGVOLANDO POR EL NORTE
Tal vez sea por que estoy entrando en alguna edad misteriosa en que necesito saberlo todo, sentirlo todo, que me fui a volar en avioneta sobre el desierto de Chile. Estaba preparada psicológicamente para enfrentar los vaivenes y movimientos violentos, las caídas y el sentir que estas volando totalmente vulnerable sobre un aparato que te lleva a 10.000 mts. de altura, con tan poco donde afirmarse, al menos, psicológicamente.
Pero, ya estábamos allá y había que ser aguerrida, llegamos al aeródromo donde habían unas seis piezas bien cuidadas y de diferentes tamaños, colores y propósitos, la nuestra…? era una hermosura, preparada para transportar seis personas, si tenía hasta cortinitas en sus ventanas!!. Nuestro piloto, un amigo que ya tenía más de 600 horas de vuelo, me enteré más tarde que era una cantidad bastante aceptable y…, confiable.
Y comenzó nuestro ascenso, se empujo el avión hasta el medio de la pista con un mini remolque, en realidad era un motor enorme con ruedas, (lo más probable es que tenga un nombre, por supuesto que yo no lo pregunté, la emoción seguramente) se subió el piloto y empezó a mover botones en todas direcciones, de pronto, ran ran… las hélices Sigue leyendo

¿Eres?

¿Eres?

¿Eres la semilla en descanso
que espera paciente
partirse entre mis labios?

Tal vez, un dibujo de kandinski en mi memoria,
o un solfeo en manos de Vivaldi
¿Eres ese roble erguido
que se yergue en los bosques Sigue leyendo

¡A ti, me debo entera!

Amor, me debo a ti…, ¡entera!,
a tus manos a todo tú, yo me debo.

Me debo entera, enteramente a ti,
completa y profundamente a ti,
a tus ojos, a tu abrazo,
a la caricia…, a ¡ese beso!,
¡oh Dios, a él le debo mi alma!
porque es de ella su ignoto alimento.

Me debo…,

A cada uno de tus dedos,
a tu pelo y cuello, al olor de tu piel,
a la tierra que pisas, al cielo que admiras,
me debo aguerridamente a ti…,
¡a ti, yo me debo entera!

El Ave y el pétalo

Tendido en la flor, el pétalo duerme,
espera impaciente al trino y al ave
que en vuelo cansino, traerá dulzor.

Presiente su alma, de pétalo inquieto,
que aquel picoteo de pájaro níveo,
despertará en él la vida, que sabe perdida
y que antaño anidara…, en su alma de flor.

¡Y llegó en canto el día…!, en que el pájaro erguido
¡¡vestido en plumaje de cortejo nupcial!,
con su pico altivo, su tez de enigma, Sigue leyendo

Poema I Socorro Carranco

Socorro Carranco, poetisa Mexicana de alta trayectoria en la poesía de ese país, les dejo esta maravilla.

POEMA 1

Es el grito que fulmina
tener sus manos
ataviadas de sudor
sobre tu cuerpo.
Es la bocanada agria
que sale del beso
sin testimonio de amor.
Es la hora de cerrar tus puños
volver a la razòn
recuperar el corazòn
romper la noche en el desierto.

Amor Tremendo

AMOR TREMENDO
Amor tremendo este que me envuelve
amor, por sentirle tan adentro…

(Posesa de él en espacios infinitos,
en lugares donde no camina el tiempo,
donde se fecunda generoso el silencio.)

Y quédome allí…, postrada frente a él,
amándole de una forma que no entiendo, Sigue leyendo

Por una vez quiero.

 Por una vez quiero

Por una vez quiero,
me digas al oído
un montón de palabras,
palabras sueltas,
sin pretensión ni tiempo.
Que me digas por ejemplo
en un día cualquiera,
¡Por Dios que estas bella!
Aunque parezca un pájaro triste
sin plumas doradas Sigue leyendo

Necesito

 Necesito…, Beberte en sorbos lentos
para que no te acabes nunca,
tener un tiempo infinito degustando
las líneas de tu cuerpo.

Necesito…, que te quedes en silencio
para ser así, plegaria de tu boca,
beso de tus manos,
silencio de tus noches.
Quiero amor, inventes un universo
donde pueda ser origen Sigue leyendo

Poemas de Maria Rilke

Rainer María Rilke
(Praga, 1875 – Suiza, 1926)

(Tomado de la pagina que esta linkeada a este blog, Libreria Hispana)

Ofrenda a los Lares
(1895)

EN LA VIEJA CASA
En la vieja casa, libre ante mí
diviso Praga entera a la redonda;
al fondo, silencioso y quedo el paso,
pasa de largo la hora honda del crepúsculo.

La ciudad se desvanece como detrás de una luna.
Alta sólo, al modo de un gigante empenachado,
se alza ante mí la cúpula verdosa
de la Torre de San Nicolás.

Ya parpadea aquí y allá una luz
lejana sobre el denso fragor ciudadano. -*
Para mí es como si en la vieja casa
ahora una voz me dijera «Amén».

-* Rilke usa con frecuencia el signo – (Gedankenstrich) para señalar una interrupción, una pausa o una palabra que consciente e intencionadamente se omite.

 .

UNA CASA NOBLE
La noble casa con su ancha rampa:
qué bello quiere mostrárseme su brillo gris.
La subida con su mal empedrado,
y allí está en la esquina
la lámpara opaca y sucia.

En el antepecho de una ventana
ladea la cabeza un palomino
como queriendo echar una mirada
a través del paño de la cortina;
moran las golondrinas en las grietas
entre los pasos de los portalones:
a esto llamo yo Stimmung*,
sí, yo lo llamo -encanto.

-*La palabra Stimmung no se puede traducir directamente. Expresa un estado anímico propicio y concorde. Caracteriza propiamente lo lírico, en consonancia con el re-cuerdo (Er-innerung), así sucesivamente evocado. Rilke traduce aquí ese estado con el vocablo «encanto» (Zauber).

ENCANTO
A menudo veo el cuarto de intimidad animado,
con vivacidad cuentan las paredes;
una amable muchacha, medio niña aún, alza
las manos hacia el cuadro de María.

Un chico aplicado está junto al padre,
que mucho ha aportado para la casa.
Se disponen a rezar la oración angélica,
y la madre da un descanso a la rueda de hilar.

Me parece entonces que los ojos se humedecen,
hasta los de la Virgen en el marco.
Escucho: en la voz de bajo del padre
suena propicio el Amén.

OTRO ENCANTO


El hijo se acerca, pesado el paso,
a su padre. Y con torpeza en la lengua…
¿Es verdad? ¿qué, qué dices, una novia?
¡Adelante, adentro, pues, con ella!

Y allí está por vez primera de pie.
La muchacha se ruboriza y calla,
y el padre limpia las gafas.
¡Diablo! ¡Estupenda ha sido tu elección!

Y el padre abre los brazos,
y la novia aturdida
recibe su beso y su bendición.

La colección de poemas bajo el título Ofrenda a los Lares (Larenopfer), correspondiente al primer grupo de los llamados Primeros Poemas (Erste Gedichte), apareció por Navidades en 1895. Se presume que fueron escritos avanzado el otoño de ese año en Praga. Los poemas no están fechados por separado, a excepción de los tres últimos.
Los noventa y nueve poemas que integran esta colección están dedicados a Praga, su ciudad natal, y a Bohemia. Se ha señalado su carácter descriptivo y su tono neorromántico e impresionista, pero lo importante para nosotros es la dimensión lárica, que impregna su productividad ulterior en connotación mítica y cósmica, especialmente con el paisaje. Lo lárico, nos dice en carta «a una amiga» (17 de julio de 1926), «fue, por decirlo así, en su pletórica forma, la fíbula de mimmovida existencia». Y en la famosa epístola a Hulewicz (25 de noviembre de 1925) nos habla del contenido lárico de las manzanas europeas, en contraposición con la uniformidad de las que ya por entonces venían de Estados Unidos.

Coronado sueño
(1896)
CANCIÓN REGIA
Debes con dignidad soportar la vida,
tan sólo lo mezquino lo hace pequeña;
los mendigos te podrán llamar hermano,
y tú puedes sin embargo ser un rey.

Aunque el divino silencio de tu frente
no lo interrumpa dorada diadema,
los niños se inclinarán en tu presencia,
los entusiastas te mirarán atónitos.

A ti los días de rutilante sol
te hilarán rica púrpura y blanco armiño,
y, con pesares y dichas en sus manos,
de rodillas ante ti estarán las noches…
Praga, 9 de septiembre de 1896.

Damos aquí tan sólo esta composición que preside emblemáticamente un conjunto de veintiocho poemas de corte neorromántico escritos en Praga. Fueron estudiados por Peter Demertz, René Rilkes PragerJahre, Düsseldorf, 1952. «Canción regia» es símbolo del poeta.

Adviento
(1897)
ADVIENTO
Empuja el viento rebaños de copos
por el bosque invernal como un pastor,
y más de un abeto siente que pronto
se hallará nimbado de luz y amor;
y escucha un rumor distante. Resuelto
tiende sus ramas por senderos blancos,
y hace frente al viento y crece soñando
una noche de gloria y majestad.
Primera redacción: Munich, 26 de enero de 1897;
redacción definitiva: finales de 1897 en Berlín.

La colección de poemas reunidos bajo este título general apareció por Navidad de 1897, y fueron escritos en los años 1896 y 1897. Más tarde se añadieron cinco poemas (1894-18979 en la edición de los llamados Primeros Poemas, en 1913, en la cual se incluyeron también los poemas láricos de Praga, seguidos de Coronado sueño y Adviento. Damos sólo el poema «Adviento» por su carácter representativo. El ciclo consta de 79 poemas. Se ha señalado en ellos la inluencia de Jacobsen.
Poemas tempranos
(1899)
Ésta es la nostalgia: morar en la onda
y no tener patria en el tiempo.
Y éstos son los deseos: quedos diálogos
de las horas cotidianas con la eternidad.

Y eso es la vida. Hasta que de un ayer
suba la hora más solitaria de todas,
la que sonriendo, distinta a sus hermanas,
guarde silencio en presencia de lo eterno.
Berlín-Wilmersdorf, 3 de noviembre de 1897.

No puedes esperar hasta que Dios llegue a ti
y te diga: yo soy
Un Dios que declara su poder
carece de sentido.
Tienes que saber que Dios sopla a través de ti
desde el comienzo,
y si tu pecho arde y nada denota,
entones está Dios obrando en ti.
Sin fecha (1898-1899).

Segunda edición muy refundida entre 1908 y 1909, con poemas escritos en su mayor parte entre noviembre de 1897 y finales de 1898. Fueron publicados por la Navidad de 1899, junto con el poema escénico «La princesa blanca» (Die weibe Fürstin).

Libro de las horas
(1905)
Puesto en las manos de Lou
I. LIBRO DE LA VIDA MONÁSTICA
[ 5 ]
(Selección)
Amo de mi ser la cosas oscuras,
en las cuales se ahondan mis sentidos;
en ellas, tal como en añejas cartas,
hallé mi vida diaria ya vivida,
superada, hecha lejana leyenda.

De ellas sé que tengo espacio para una
segunda vida, anchurosa y sin tiempo.
Y a veces soy como el árbol que adulto
y rumoroso, encima de una tumba,
cumple el sueño que el muchacho, ya sido,
(por el que se entran sus raíces cálidas)
perdió en melancolías y canciones.
22 de septiembre de 1899.

[ 36 ]
¿Qué harás tú, oh Dios, cuando yo muera?
Yo soy tu cántaro (¿y si me quiebro?)
Yo soy tu bebida (¿y si me corrompo?)
Soy tu ornato y tu oficio.
Tú pierdes conmigo tu sentido.

Después de mí no tendrás casa en donde
palabras cercanas y cálidas te saluden.
De tus pies cansados se caerá
la sandalia de seda que yo soy.

Tu gran manto se soltará de ti.
Tu mirada, que yo acojo caliente
en mis mejillas, como en una almohada,
andará buscándome largo tiempo –
y a la hora del ocaso se echará
en el regazo de unas piedras desconocidas.

Y tú, oh Dios, ¿qué harás? Yo tengo miedo.
26 de septiembre de 1899.
II. LIBRO DEL PEREGRINAJE
(Selección)
[ 1 ]
No te maravilla el ímpetu del huracán,
tú lo has visto crecer: –
los árboles huyen, y su huida
crea avenidas marchando solemnes.
Entonces sabes que el que ante ellos huye
es aquel con quien tú vas,
y tus sentidos lo cantan
cuando estás asomado a la ventana.

En calma quedaban las semanas estivales,
ascendía la sangre de los árboles:
ahora tú sientes que quiere caer
en el que todo hace.
Creías reconocer ya la fuerza
al abrazar el fruto,
ahora se vuelve de nuevo enigmático,
y eres una vez más huesped.

El estío fue casi como tu casa,
en ella tú sabes mantener todo –
ahora has de ir fuera en tu corazón
al igual que se va por la llanura.
Empieza la grandiosa soledad,
sordos se tornan los días,
de tus sentidos toma el viento el mundo
como una hoja muerta.

A través de su ramaje vacío
ve el cielo él que tú tienes;
sé tú tierra ahora y canción de ocaso,
y país que con el cielo hace juego.
Sé humilde ahora como una cosa,
madura para la realidad, –
para que Él, del que salió el conocer
te sienta cuando te asga.
18 de septiembre de 1901
III: LIBRO DE LA POBREZA Y DE LA MUERTE
(Selección)
[ 30 ]
La casa del pobre es como un sagrario.
En su interior lo eterno se cambia en alimento,
y al anochecer regresa suave
hacia sí, en un anchuroso círculo,
y se acoge en sí, lento, pleno de resonancias.

La casa del pobre es como un sagrario.

La casa del pobre es como la mano de un niño.
No toma lo que los adultos piden,
le basta un escarabajo con ornadas pinzas,
una piedra ovalada de rodar por el río,
la corrediza arena y las conchas sonantes.
Es como una balanza suspendida,
sensible a la más leve recepción,
oscilando largamente entre los dos platillos.

La casa del pobre es como la mano de un niño.

Es como la tierra la casa del pobre:
esquirla de un venidero cristal,
ya claro, ya oscuro, en su huidiza caída;
pobre cual la cálida pobreza de un establo, –
y no obstante están los anocheceres: en ellos es ella todo,
y de ella vienen todas las estrellas.
19 de abril de 1903
LIBRO DE LAS IMÁGENES
(1902 – 1906)

INFANCIA
Allí transcurre la larga angustia de la escuela
y el tiempo de espera con objetos indistintos.
Oh soledad, oh pesadumbre de pasar el tiempo…
Y al salir: bullen y suenan las calles,
y en las plazas se elevan surtidores,
y en los parques cobra amplitud el mundo.
E ir por todo eso en traje infantil,
muy distinto de los que van o fueron:
Oh edad singular, oh pasatiempo,
oh soledad.

Y contemplar de lejos todo eso:
hombres y mujeres; hombres y mujeres
y niños, que son otros y vistosos;
y allá una casa, y a ratos un perro,
y un susto mudo, qué sueño, qué espanto,
oh qué hondura sin fondo.

Y así jugar: pelota y arco y aro
en un jardín, que suave palidece,
y a veces, por tocar a los mayores,
ciego y loco jugando al escondite,
pero quieto al anochecer, y volver a casa
pasito a paso, tieso y cogido de la mano:
Oh qué comprender siempre más y más huidizo,
oh qué angustia, qué peso.

Y arrodillarse muchas horas junto al estanque
grande y gris con el barquito de vela;
olvidándolo, porque otros iguales,
de velas más lindas, circulaban por delante,
y tener que pensar en la carita
pálida que parecía hundirse en el estanque:
Oh la infancia, oh comparación inaprensible.
¿Adónde fue, adónde?
Meudon-Val-Fleury, invierno de 1905-1906
(primer libro, primera parte).
FINAL
La muerte es grande.
Somos los suyos
de riente boca.
Cuando nos creemos en el centro de la vida
se atreve ella a llorar
en nuestro centro.

La primera edición apareció en julio de 1902, compuesta con poemas de los años 1898 hasta 1901. La segunda edición fue terminada el 12 de junio de 1906, y apareció en diciembre de ese mismo año, aumentada con poemas de los años de 1902 hasta 1906. La revisión definitiva del texto para la quinta edición es de 1913.
Estos poemas se hallan agrupados en dos libros, ambos a su vez divididos en dos partes, sin que constituyan un ciclo ordenado cronológicamente. Por la fecha de su composición se sitúan entre el Libro de las Horas y los Nueve Poemas. Pertenecen, por consiguiente, a la etapa juvenil (Jugendstil). En nuestra selección nos hemos atenido tan sólo a aquellos que Rilke hará objeto de ulterior profundización, siempre impregnada de intimidad.
Nuevos poemas
(1907)

EL POETA
De mí te alejas, hora.
El batir de tus alas me hace heridas.
Solitario: ¿qué puede hacer mi boca
con mi noche y mi día?

No tengo amada, ni casa, ni sitio
donde poder vivir.
Todas las cosas a las que me entrego
se hacen ricas y a mí me dejan pobre.
Meudon, invierno de 1905-1906.

RETRATO JUVENIL DE MI PADRE
En los ojos sueño. La frente como en contacto
con algo lejano. Bordeando la boca mucha
juventud, seducción no sonreída,
delante de los alamares de adornos rebosantes
del esbelto, noble uniforme,
la cazoleta del sable y ambas manos,
que esperan tranquilas, de nada codiciosas.
Y ahora ya casi invisibles: como si
se disiparan asiendo la lejanía.
Y todo lo restante consigo mismo oculto
y apagado como si no lo comprendiéramos,
profundamente velado por su propia hondura.

¡Tú, daguerrotipo, qué rápido te desvaneces
entre mis manos más lentamente desvanecidas!
París, 27 de junio de 1906.

Segunda serie
(1908)
A mon grand ami Auguste Rodin
LA DAMA ANTE EL ESPEJO
Como en embriagadora especería
desata sin ruido en la fluidez clara
del espejo sus fatigados gestos;
e introduce allí dentro su sonrisa.

Y aguarda hasta que de todo eso ascienda
el líquido; luego vierte el cabello
en el espejo y, alzando los hombros
maravillosos del traje de noche.

bebe callada de su imagen. Bebe
lo que una amante en éxtasis bebiera,
inquiriendo desconfiada; y hace

un guiño a su doncella, si ve luces
sobre el fondo del espejo, roperos,
y lo turbio de una hora trasnochada.
París, entre el 22 de agosto y el 5 de septiembre de 1907

Los poemas de la primera serie se compusieron de 1902 – 1903 a 1907, y aparecieron en diciembre del mismo año. Los poemas de la segunda serie fueron escritos entre el 31 de julio de 1907 y el 2 de agosto de 1908, y aparecieron a comienzos de noviembre de 1908.
Con estos poemas nace el «poema cosa» (Ding-Gedicht), denominado también «poema de arte» (Kunst-Gedicht). El poeta bajo la influencia de Rodin y de Cézanne, crea estos hermosos poemas plásticos, rotundos, dotados de la inmarchitable individualidad de un cuadro o de una escultura.