Entonces apareció el zorro:
-¡Buenos días! -dijo el zorro.
-¡Buenos días! -respondió cortésmente el principito que se volvió pero no vio nada.
-Estoy aquí, bajo el manzano -dijo la voz. -¿Quién eres tú? -preguntó el principito-. ¡Qué bonito eres!
-Soy un zorro -dijo el zorro.
-Ven a jugar conmigo -le propuso el principito-, ¡estoy tan triste!
-No puedo jugar contigo -dijo el zorro-, no estoy domesticado. -¡Ah, perdón! -dijo el principito.
Pero después de una breve reflexión, añadió: Sigue leyendo →
Escribo para el agua
que corre hambrienta por la tierra,
por los dioses que habitan en mis cerros,
(aquellos que se empinan en mi sangre,
partiéndome los días con su espera).
Escribo,
por aquello que veo y me duele de la vida,
por el dolor que camina cabizbajo por mi lado,
por los pobres, ¡los podridamente pobres!,
aquellos que lloran por migajas de alimento,
los que rompen la palabra con los ojos,
los que mueren en la misma tierra nuestra,
pero solos…, ¡Dios, abísmantemente solos!
¿y el mundo? los mira indiferente,
sentado desde un palco de ironía.
Escribo por aquellos,
que están secos de esperanza.
Con el llanto derretido en las pupilas.
Con el miedo lacerándoles el alma.
Escribo para ti, si, para ti
que juegas con mi piel sin saberla de tus labios,
jamás canela de tus aguas, nunca miel de tus panales.
Y aún así, escribo para ti. Sigue leyendo →
Desvariando con Whitman. Otro de mis autores preferidos. Lo admiro porque tiene la palabra cruda, no vestida ni almidonada, yace en las ideas como lo haría un hoja que cae suave en un lago calmo, y ahí, en esa quieta calma se embelesa con la frescura que absorbe del agua, sin transmutarla ni vestirla ni cambiarle un átomo de su esencia. En este poema me regocijo por los caminos que nos muestra, el amante y la totalidad.
(5)
Creo en ti, alma mía, el otro que soy
no debe humillarse ante ti, Sigue leyendo →
Esto pasó hace un par de días, pasó cuando uno cree que ya nada puede pasar, cuando el día se está yendo en forma calmada y suave, sin altibajos ni sobresaltos, suavemente…, llega un correo. Lo abres, valga decir que también sin muchas expectativas, (llega tanta basura todos los dias via email, que creo ya estamos todos medios cansados), pero oh sorpresa, me encuentro con una buena noticia, una revista que despertó de inmediato mi interés, entré y valió la pena.
Comparto con ustedes este regalo. Revista «Mundo Libre». Abarca tópicos de interés general, ciencias, literatura, espiritualidad… ¡¡de todo!! Y con un formato liviano y fácil de seguir.
Todos los días sucede algo que me sorprende, y eso, hace que las ganas de seguir caminando, siempre reúnan fuerzas.
La vida se parte en millones de trazos, los reales…, (y aún así no se ven)
Se pasean en tenue danza ante mis ojos,
mostrándome los dos o tres lados que posee
cada milagroso instante, sincronizando los tiempos
para que imaginemos que baila junto a nosotros.
Imaginamos – la – vida – en – un – largo – eterno
– e -interminable – espacio – tiempo.
(Y pareciera que se mueve ) y sin embargo,
todo acontece en – UN – solo – magnífico – instante
que une del primero hasta el último punto,
como un infinito e incansable juego de domino en cadena.
Cada movimiento determina el siguiente,
cada acción determinará la siguiente.
Y todo eso ocurre…, entre el cielo y la tierra
mientras mi faz sonríe.
El misterio de la vida se pierde, pasa desapercibido ante el ruido que habita en el mundo, y en las palabras que pululan en entropía en nuestra mente. Les dejo esta pequeña selección, que espero disfruten tanto como yo.
Cabe preguntarse ¿seguiremos pensando que somos únicos, en Adán y Eva, en que somos tan importantes como para gastar la vida mirando a una nariz de distancia…?
Sería fantástico si de pronto olvidara como me llamo, o como camino por las enrejadas mañanas de invierno, olvidar el verde del campo en primavera, de aquellas noches refulgentes de estrellas o del olor a café, a mango recién cortado, a la piel de los hijos, al verde profundo de las hojas en brote.
Sería grandioso olvidar a mis muertos, también a los vivos y así no tener apegos, ni lagrimas, tampoco risa. Ser como el aire, sin raíces ni cimientos. Sería grandioso pararme en las esquinas de una vida cualquiera y oler sus días, amasar sus tristezas hasta convertirlas en pan fresco, peinar mi pelo con rebeldía, mojar mis pies en las orillas de un río limpio, atestado de piedras parlanchinas, esas que brotan sin nombre. Caminar descalza por la tierra en siembra, tenderme en el pasto y ser festín de chinitas y hormigas en letargo.
Sería perfecto olvidar como beso, mi tacto y mi rostro, olvidar que existo, que he existido tanto, que existiré tanto más. Vestirme con paños de colores de esos que no matan, jamás con seda, nunca con pieles. Abrigarme sólo de besos cuando estoy enamorada y de lagrimas amarillas cuando tengo pena, me gustaría olvidar las palabras, lo que pienso y los ojos de los que amo, sería perfecto no saber de donde provengo, ser etérea y sutil, tanto que pueda estar en todo, hasta no ser nada.
Juventud, anhelada y sobredimensionada juventud. La noche estuvo repleta de ella, los rincones se dejaron aplastar por la energía y sonrisas seductoras que se escapaban de los rostros de los jóvenes escritores que nos acompañaban Sigue leyendo →
La música en las tertulias donde exponían Gregorio Angelcos y Tere Calderon fue ejecutada por una encantadora Cecilia Almarza y simpático Hugo Knust, ambos amantes de la Bossa.
VI
La tierra toda me embriaga
Y raíces de barro sostienen mi cara
Y soy toda tierra, árbol, aire.
XXX
Tengo una profundidad
que no logro atravesar,
duerme a mi lado furibunda,
extraviada,
mientras un silbido inocente
se escapa de mis ojos mientras rezo.
Un cineasta francés descubrió, por azar, un texto desconocido de uno de los más influyentes poetas del siglo XIX, Arthur Rimbaud.
El cineasta, Patrick Taliercio, de 32 años, encontró el documento en Charleville, la ciudad del norte de Francia donde Rimbaud nació en 1854.
Taliercio, quien está realizando un documental sobre el poeta, buscaba información en una librería de viejo cuando el dueño, François Quinart, le mostró tres ejemplares del periódico Le Progrès des Ardennes.
En uno de ellos, del 25 de noviembre de 1870, que el cineasta compró por 30 euros, aparecía un artículo titulado «El Sigue leyendo →
Esta será dedicada a los Sonetos. Veamos que es un soneto; son poemas escritos con cuatro estrofas (catorce versos endecasílabos) y cada verso de once sílabas métricas (también hay de doce y catorce). Se distribuyen en dos cuartetos (cuatro versos) y dos tercetos (tres versos) y tienen un juego rítmico variable, puede ser ABBA ABBA y CDC DCD o CDE CDE, por supuesto que con el tiempo estas reglas se han ido rompiendo, llamándose sonetos blancos, incluso a poemas que de Sonetos sólo conservan los catorce versos, como el que va al final escrito por Pablo Neruda.
Creo que la gracia de este tipo de poesía, la «trabajada» es que el poeta debe mantener la armonía y belleza de lo dicho, pero haciendo calzar cada una de estas piezas en el juego poético. Buen desafío para los que nos llamamos poetas.
Un verso libre o blanco como también se le denomina, es un verso que no tiene reglas, puede ser escrito con la cantidad de versos que se quiera, sin control métrico ni restricciones en la rima.
Encontramos en la poesía de Charles Baudelaire un doble aspecto de interés; como ocaso del Romanticismo y como puente hacia la Literatura Simbolista y precursor de la poesía del siglo XX. Trabajaremos la poética de Baudelaire como precursora del Simbolismo en tres aspectos esenciales, siguiendo el enfoque, en parte de A. Balakian «El movimiento Simbolista»:
a) En su concepción del «poeta»;
b) en su concepción de la Poesía, y
c) en el delineado del perfil del Decadente, tan importante en la estética de la escuela y del movimiento finisecular que hemos llamado Simbolismo.
En su concepción del Spleen , asco de sí mismo, o hastío, Baudelaire se aleja del Romanticismo y se acerca a la poesía pos- romántica. Baudelaire vuelve sobre sí mismo para hundirse en la perversidad que lo llevará a la destrucción y a la muerte.
El primer aspecto en que nos fijaremos es entonces en ese concepto del Poeta que cambió decididamente la poesía occidental.
Mientras que la poesía de corte hugoniano concibe al poeta como un profeta que ilumina el porvenir, por lo tanto, su misión es sagrada, en Baudelaire el poeta es un ser sufriente y agobiado, que está rodeado de sordos oídos y pétreos espíritus.
En el poema LES PHARES encontramos ya un mundo nuevo: la poesía es testimonio de dolor y de la dignidad humana en medio del llanto. Si bien con el símbolo del Faro, retoma un tema de estirpe romántica acá aparece decididamente transformado: el poeta es un ser sufriente que puede además llegar a ser desafiante.
Baudelaire introduce en 1859 la palabra modernidad, captar en la ciudad la belleza hasta ahora no descubierta. Lo moderno es lo transitorio y lo fugitivo: el poeta debe sacar de lo eterno de lo transitorio. ¿En qué se convierte entonces el poeta, poco a poco desde Baudelaire? Creemos que hay en esta concepción un intento de reservarle al poeta un espacio privado, luminoso, que le permita descifrar las analogías del universo. Está pues fundando la actitud estetizante y aristocrática de los futuros torremarfilistas. Sigue leyendo →
Amigándonos con la poesía, especialmente dedicado a Karen, Milla y JCJurado.
Iré dejando algunas entradas que tendrán relación directa, con la poesía y algunos de los poemas que lograron despertar mi amor por la poesía.
Partiremos con un poema de Becker que es capaz de mostrar de una forma bella y al mismo tiempo de desgarradora crudeza lo que es la muerte. Cuando lo leí por primera vez no pude menos que sentirme profundamente acongojada, y a la vez, admirar el arte poético.
No es fácil escribir una poesía que contenga más de noventa seis versos, todo escritos en seis sílabas métricas (hexasílabo), ni una más ni una menos y, que sea capaz de no perder su fuerza, la armonía y esa coherencia poética que lo hace comprensible al lector. (Por supuesto que se han escrito otros poemas mucho más extensos, pero quise traer este porque en lo personal, me gusta muchísimo.)
Cerraron sus ojos…
Cerraron sus ojos
que aún tenía abiertos,
taparon su cara
con un blanco lienzo,
y unos sollozando,
otros en silencio,
de la triste alcoba
todos se salieron.
La luz que en un vaso
ardía en el suelo,
al muro arrojaba
la sombra del lecho,
y entre aquella sombra Sigue leyendo →
No se si es más…,
el rumor de la noche
que se enjuga el llanto
en el halito divino del amado
… o el gorjeo del ave
cuando muere su canto
al quebrarse la mañana.
No sé si es más…,
el ronco crepitar del mar
cuando se estrella violento con las rocas,
que vestidas de luna y henchidas de gozo
celebran nupcias cada noche con el agua.
No sé…,
no sé¡ si es Dios hablándome en susurros
que una fuerza ajena a este mundo,
me impele a crear la morada de mi cuerpo
en el cuenco divino de tu mano.
…tal vez, es sólo el sonido del pecado
cuando rasga en premura la agonía
de saberse prohibido…
O es el llamado de mi nombre
Al morir en boca
del amado
El silencio de la nieve, pensaba el hombre que estaba sentado inmediatamente detrás del conductor del autobús. Si hubiera sido el principio de un poema, habría llamado a lo que sentía en su interior el silencio de la nieve.
Alcanzó en el último momento el autobús que le llevaría de Erzurum a Kars. Había llegado a la estación de Erzurum procedente de Estambul después de un viaje tormentoso y nevado de dos días, y mientras recorría los sucios y fríos Sigue leyendo →
Dentro del último ciclo de tertulias de este año, esta un autor que me dejó gratamente impresionada. Ya explicaré por qué, pero debo aclarar que idual forma, no deja de sorprenderme como cada uno de ellos me ha despertado de alguna manera. La calidad literaria, esa humanidad que se arranca de la mirada, siempre es algo…, siempre es algo. Bueno, en Sigue leyendo →
Llovía torrencialmente el día de la tertulia, por alguna razón me sentía cansada, tenía ganas de irme a casa a trabajar en mi libro, ¿pero cómo?, ¡era noche de tertulias!. Pensé que iría muy poca gente, pero me equivoqué rotundamente, había más gente que nunca, la vida es tan curiosa cuando pensamos que vamos por un camino, despertamos en uno Sigue leyendo →
No hay otro tiempo que el ahora, este ápice
Del ya será y del fue, de aquel instante
En que la gota cae en la clepsidra.
El ilusorio ayer es un recinto Sigue leyendo →
Socorro Carranco, define su trabajo poético como una tarde de verano donde la lluvia parece salir de sus poros, y la soledad se vuelve manto crepuscular de sus versos. Nació en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. México. Realizó estudios Comerciales y Bancarios en el Instituto Washington de la Ciudad de México; Técnica de Actuación en la Escuela de Iniciación Artística del Seguro Social.
Participó como actriz radiofónica en la XEW, fotonovelas y doblajes. Como escritora ha participado en diversos encuentros, nacionales e internacionales. Ha colaborado en revistas y periódicos estatales y nacionales. Ediciones Sigue leyendo →
La candente mañana de febrero en que Beatriz Viterbo murió, después de una imperiosa agonía que no se rebajó un solo instante ni al sentimentalismo ni al miedo, noté que las carteleras de fierro de la Plaza Constitución habían renovado no sé qué aviso de cigarrillos rubios; el hecho me dolió, pues comprendí que el incesante y vasto universo ya se apartaba de ella y que ese cambio era el primero de una serie infinita. Cambiará el universo pero yo no, pensé con melancólica vanidad; alguna vez, lo sé, mi vana devoción la había exasperado; muerta, yo podía consagrarme a su Sigue leyendo →
Me provoca tu beso
y el grueso de tus labios.
Me provoca tu sonrisa,
y esa mirada infinita
que se escapa de tus ojos,
al solo imaginarlos.
Me provocan tu boca
haciendo piruetas en mi vientre,
y tus dedos suaves
bordándome lirios en la espalda.
Me provoca tu pecho ¡todo entero
derramándose en el mío!,
tu vejez exquisita plena
de experiencia
silenciando mi palabra.
Me provoca tu delirio y tu silencio,
tus manos, todas ellas me provocan
¡no sabes cuanto!
Ay cariño, si todo tú…,
toda entera me provocas,
tanto…, que haces
desbordar mi alma
de tanto provocarme.
Ernesto Langer y el portal «ESCRITORES.CL» un escritor que pone enfasís en la literatura, transcribo un interesante artículo realizado a este escritor y su portal.
Para Ernesto Langer Moreno, editor del web literario chileno «escritores.cl», la noción de una comunidad literaria
Ernesto Langer
virtual es escencial para su trabajo. Langer está convencido de que Internet ha creado oportunidades sin precedentes para escritores, no sólo como medio económico de publicación y amplia difusión, sino además en su rol de facilitador de creación de comunidades. «Internet permite a la comunidad literaria abrirse, reuniendo a las partes interesadas y formando una gran red revitalizadora. Nunca antes en la historia había podido un escritor comunicarse con tantas personas con afinidades similares, comentar textos y compartir información sobre los temas que nos conciernen.» (Dante, 1999). Además, Langer evoca los procesos orgánicos de comentario de texto en curso, y la consiguiente nueva redacción a través de Internet. Estos textos podrán ser publicados, Sigue leyendo →
Pedro Lemebel es seguramente el único escritor chileno que se maquilla y usa zapatos de taco alto, al menos en público. Maquillaje y tacones son parte de la propuesta contestataria de este escritor, que de ser un niño pobre criado«Porque el tiempo está cerca», publicado en una antología de 1983. El autor tenía entonces 26 años y trabajaba como profesor de Artes Plásticas en dos liceos, de los cuales fue despedido ese mismo año, presumiblemente por su apariencia, ya que no hacía mucho esfuerzo por disimular su homosexualidad. Después de esa experiencia no volvió a hacer clases y decidió concentrarse en los talleres de escritura. Allí fue forjando redes intelectuales, políticas y afectivas, principalmente con escritoras feministas y de izquierda como Pía Barros, Raquel Olea, Diamela Eltit y Nelly Richard, quienes lo acogieron y vincularon a instituciones que estaban a medio camino entre la cultura Sigue leyendo →
Yo quiero una mujer para apagar mis ansias,
dijo el ángel, y un gesto obsceno le oscureció el semblante.
Estoy harto de alas y miriñaques,
ahora quiero deshonrar mi estirpe entumecida.
Quiero unos pechos vastos, formidables
en extensión incierta como pensamientos humanos;
que se hundan en ellos mis torpes manos pudibundas.
Mis antiguas plegarias han de ser besos y saliva.
Quiero una inconfesable lujuria.
Se subleva mi espíritu macilento
mi espalda sudorosa se inclina sobre un cuerpo
que parece ardorosa convulsión del infierno
Quiero un goce satánico
dos piernas que agonicen de estertor
y dos manos que perturben mi agónico sentido.
No recuerden mis cánticos.
Mis alas están yertas.
Tan sólo quiero una mujer
y su nefasta dulcedumbre.
Si Pudiera. Si pudiera ser ángel,
ser santa para rezar
en cada orilla de tu cuerpo,
canonizarte en los bosques
de tu prolifero pecho.
¡Como quisiera ser agua,
agua sacra y bendita
de un monasterio de pueblo
y así, cuando tus manos en rezo
se unten piadosas a ella,
pudiera vagar por tu piel
como lo hace el lucero…
cuando acaricia a Dios,
en silencio.
” Quién contiene a la diversidad y es la Naturaleza
quién es la amplitud de la tierra y la rudeza y sexualidad de la tierra
y la gran caridad de la tierra, y también el equilibrio
quién no ha dirigido en vano su mirada por las ventanas de los ojos
o cuyo cerebro no ha dado en vano audiencia a sus mensajeros
quién contiene a los creyentes y a los incrédulos
quién es el amante más majestuoso
quién, hombre o mujer, posee debidamente su trinidad de realismo
de espiritualidad y de lo estético o intelectual
quién después de haber considerado su cuerpo
encuentra que todos sus órganos y sus partes son buenos
quién, hombre o mujer, con la teoría de la tierra y de su cuerpo
comprende por sutiles analogías todas las otras teorías
la teoría de una ciudad, de un poema
y de la vasta política de los Estados
quién cree no sólo en nuestro globo con su sol y su luna
sino en los otros globos con sus soles y sus lunas
quién hombre o mujer, al construir su casa
no para un día sino para la eternidad
ve a las razas, épocas, efemérides, generaciones.
El pasado, el futuro, morar allí, como el espacio
indisolublemente juntos
Cuando terminé de leer esto tenía los ojos llenos de lagrimas. Cuando el peso del mundo me ahoga, cobro nuevas fuerzas con textos como estos, la lucha y la esperanza son cinceles que hacen una obra maestra.
Discurso a raíz de la edición del millar de ejemplares de Cien años de Soledad
Cartagena de Indias, Colombia.
«Ni en el más delirante de mis sueños, en los días en que escribía «Cien Años de Soledad», llegué a imaginar que podría asistir a este acto para sustentar la edición de un millón de ejemplares. Pensar que un millón de personas pudieran leer algo escrito en la soledad de mi cuarto, con 28 letras del alfabeto y dos dedos como todo arsenal, parecería a todas luces una locura.
Hoy las academias de la lengua lo hacen con un gesto hacia una novela que ha pasado ante los ojos de cincuenta veces un millón de lectores, y hacia un artesano, insomne como yo, que no sale de su sorpresa por todo lo que le ha sucedido.
Pero no se trata ni puede tratarse de un reconocimiento a un escritor. Este milagro es la demostración irrefutable de que hay una cantidad enorme de personas dispuestas a leer historias en lengua castellana, y por lo tanto un millón de ejemplares de «Cien Años de Soledad» no son un millón de homenajes al escritor que hoy recibe, sonrojado, el primer libro de este tiraje descomunal. Es la demostración de que hay millones de lectores de textos en lengua castellana esperando, hambrientos, de este alimento.
No sé a qué horas sucedió todo. Sólo sé que desde que tenía 17 años y hasta la mañana de hoy, no he hecho cosa distinta que levantarme temprano todos los días, sentarme frente a un teclado, para llenar una página en blanco o una pantalla vacía del computador, con la única misión de escribir una historia aún no contada por nadie, que le haga más feliz la vida a un lector inexistente.
En mi rutina de escribir, nada he cambiado desde entonces. Nunca he visto nada distinto que mis dos dedos índices golpeando, una a una y a un buen ritmo, las 28 letras del alfabeto inmodificado que he tenido ante mis ojos durante Sigue leyendo →
Hoy tengo nostalgia del Santiago de antes, ese en el que nos movíamos con una mayor unión, tal vez por las carencias, las colas o incluso las tomas, ese Santiago que se rompió en el 73 y se rearmó de una forma distinta luego del golpe. Uno en el que mi familia (1972) perdió fundos y empresas por las tomas y nos dejó casi desnudos y con pocas ganas de empezar de nuevo, también de aquel Santiago en que murió un familiar torturado y nos quedamos con la rabia y la impotencia rompiéndonos la garganta, ((1974) he pasado por todos los senderos del dolor a través de la historia política de mi país) pero aún así, era un Santiago más vivo, menos individualista, más culto y luchador, uno con una mayor búsqueda y complejidad, creo que uno más aguerrido.
No hablo de política ni gobernantes o gobernados, tampoco guerrilleros o militares, hablo de gente cotidiana, de jóvenes, niños como yo, que jugábamos en las calles con nuestros amigos. Nos entretenía encaramarnos en los árboles a tirar pepas de guindas a los transeúntes, jugar al elástico o al «luche», ¡a las bolitas!, a entrar en tropel a una de las casas donde nos esperaba la madre de turno con un apetitoso vaso de leche con milo y galletas de avena recién horneadas. Ahora los niños viven encerrados en sus habitaciones amarrandose los ojos a un computador y haciendo festines con papas fritas y mac donalds. Extraño un Santiago donde los jóvenes tenían ideales, preferencias, uno en el cuál si se tenía edad para votar, lo hacían porque creían todavía en una política justa y no corrupta, donde se leía, donde se conversaba por horas con la familia.
Ahora nuestro querido Santiago, se ha convertido en una selva de sobrevivencia, sobrevivir al día, al transantiago, a la violencia, los bajos sueldos, y el desempleo, a la delincuencia, a los pagos de los créditos que se ofrecen a una clase media hambrienta de mejoras, «a sola firma». Los que no sufren de ese tipo de males, tienen otros, problemas tienen otras luchas, sobrevivir a las apariencias, al alza del dólar y la estética, dónde las prioridades son alcanzar o mantener las «cosas», cosas que a fin de cuentas nos dejan las manos vacías, la mente estancada, la palabra muda. Añoro un Santiago con gente viva, sin importar el color político o si se inca dos o tres veces en una iglesia con cruz inclinada o erguida, da lo mismo, quiero ese Santiago unido y alegre, aquel que nos entregaba esperanza.
La verdad es que todo escritor de este planeta llamado Tierra quiere alcanzar alguna vez el Premio Nobel, incluso los que no lo dicen y también los que lo niegan.
En América Latina, especialmente, los países tienen sus candidatos, planifican sus campañas, diseñan su estrategia. Esta ha perdido a algunos que merecieron recibirlo. Tal es el caso de Rómulo Gallegos. Su obra es grande y decorosa. Pero Venezuela es el país del petróleo, es decir el país de la plata, y por esa vía se propuso conseguírselo. Designó un embajador en Suecia que se fijó como suprema meta la obtención del premio para Gallegos. Prodigaba las invitaciones Sigue leyendo →
Naturaleza de la Realidad: Diálogo entre Rabindranath Tagore y el profesor Albert Einstein, en la tarde del 14 de julio de 1930, en la residencia del profesor Einstein en Kaputh, Berlín.
Einstein: ¿Cree usted en lo divino aislado del mundo?
Tagore: Aislado no. La infinita personalidad del Hombre incluye el Universo. No puede haber nada que no sea clasificado por la personalidad humana, lo cual prueba que la verdad del Universo es una verdad humana. He elegido un hecho científico para explicarlo. La materia está compuesta de protones y electrones, con espacios entre sí, pero la materia parece sólida sin los enlaces interespaciales que unifican a los electrones y protones individuales. De igual modo, la humanidad está compuesta de individuos conectados por la relación humana, que confiere su unidad al mundo del hombre. Todo el universo está unido a nosotros, en tanto que individuos, de modo similar. Es un universo humano. He seguido la trayectoria de esta idea en arte, en literatura y en la conciencia religiosa humana.
Einstein: Existen dos concepciones distintas sobre la naturaleza del Universo: El mundo como unidad dependiente de la humanidad, y El mundo como realidad independiente del factor humano
Tagore: Cuando nuestro universo está en armonía con el hombre eterno, lo conocemos como verdad, lo aprehendemos como belleza.
Einstein: Esta es una concepción del universo puramente humana.
Tagore: No puede haber otra. Este mundo es un mundo humano, y la visión científica es también la del hombre científico. Por lo tanto, el mundo separado de nosotros no existe; es un mundo relativo que depende, para su realidad, de nuestra conciencia. Hay cierta medida de razón y de gozo que le confiere certidumbre, la medida del Hombre Sigue leyendo →
-¿Existe alguna fórmula que sea posible seguir para ser un buen novelista?
-99% de talento… 99% de disciplina… 99% de trabajo. El novelista nunca debe sentirse satisfecho con lo que hace. Lo que se hace nunca es tan bueno como podría ser. Siempre hay que soñar y apuntar más alto de lo que uno puede apuntar. No preocuparse por ser mejor que sus contemporáneos o sus predecesores. Tratar de ser mejor que uno mismo. Un artista es una criatura impulsada por demonios. No sabe por qué ellos lo escogen y generalmente está demasiado ocupado para preguntárselo. Es completamente amoral en el sentido de que será capaz de robar, tomar prestado, mendigar o despojar a cualquiera y a todo el mundo con tal de realizar la obra.
-¿Quiere usted decir que el artista debe ser completamente despiadado?
-El artista es responsable sólo ante su obra. Será completamente despiadado si es un buen artista. Tiene un sueño, y ese sueño lo angustia tanto que debe librarse de él. Hasta entonces no tiene paz. Lo echa todo por la borda: el honor, el orgullo, la decencia, la seguridad, la felicidad, todo, con tal de escribir el libro. Si un artista tiene que robarle a su madre, no vacilará en hacerlo…
-Entonces la falta de seguridad, de felicidad, honor, etcétera, ¿sería un factor importante en la capacidad creadora del Sigue leyendo →
Poeta, ensayista y traductor español nacido en Tarifa, Cádiz, en 1946.
Se educó en Granada donde cursó el bachillerato y por cuya Universidad se licenció en Filosofía y Letras en 1968. Posteriormente se doctoró en Filología Románica por la misma universidad, con una tesis sobre Luis Cernuda.
Es un miembro destacado de la Generación del 70, autor de varios libros de ensayo sobre Cervantes, Quevedo, Espronceda y Cernuda entre otros, traductor de poetas como Beckett, Holderin, Hesse y Rilke, y de importantes Sigue leyendo →
Cuando en la noche te envuelven
las alas de tul del sueño
y tus tendidas pestañas
semejan arcos de ébano,
por escuchar los latidos
de tu corazón inquieto
y reclinar tu dormida
cabeza sobre mi pecho,
diera, alma mía,
cuanto poseo, Sigue leyendo →
Marcos Rafael Blanco B. / Poeta y narrador Español (1871 – 1936)
Madre la selva canta,
y canta el bosque y canta la llanura,
y el roble que a las nubes se levanta,
y la flor que se dobla en la espesura,
y canta y juega el viento en el camino,
y en el rubio trigal las amapolas,
y en el cauce el arrollo cristalino,
y los troncos, los tallos, las corolas,
la tierra, el cielo azul, la mar gigante
y las hierbas que bordan el barranco.
Madre, es una canción dulce y vibrante,
que a Yanko llega y que comprende Yanko.
Era Yanko un chicuelo,
más rubio y sonrosado que la aurora,
con los ojos tan puros como el cielo
y el alma cual de artista soñadora.
La música del campo lo atraía…,
adivinaba un himno en los rumores, Sigue leyendo →
Este martes daremos inicio a la temporada de Tertulias Literarias Abiertas, invitados de esta semana Reinaldo Lacamara y Ximena Trocoso, ambos poetas de basta trayectoria. Cuándo?; martes 05 de Mayo, Lugar; Caffè Stop, Hernando de Aguirre con Tobalaba, casi en la punta de didamante. Metro Tobalaba. Hora; 19:00 horas.
Amante Eledin es uno de esos autores que siempre me sorprende.
Cuando nos encontramos en lanzamiento de un nuevo libro o en una lectura cualquiera, o tal vez aùn mejor, en un café a hablar de poesía, me sorprende, sí, en pocos escritores he visto ese amor que se le arranca de la palabra cuando habla de poesía. Me sorprende la solemnidad, la entrega, el sacrificio que pone cuando es invitado a realizar una lectura, o a presentar un libro, no tiene importancia mientras se trate de poesìa.
Este singular y admirado autor nos entrega en este libro una historia que fue capaz de escalar la pantalla y hacer que sus palabras se vistieran de voz.
«TRES AÑOS PARA NACER»
Este libro fue escrito en la década de los ’70, cuando Amante Eledin Parraguez asistía como alumno integrado al Saint George´s College, un colegio particular de clases alta, dirigido por la Congregación de La Holly Cross, cuyo rector era el sacerdote Gerald Whelan, a quien fue dedicada la Película MACHUCA. En esta novela, cuyo nombre original es TRES AÑOS PARA NACER, Amante Eledin relata la experiencia de haber sido alumno en ese contexto político y socio-cultural, cuando en Chile Gobernaba el Presidente Socialista Salvador Allende. En su dedicatoria dice: Dedico esta obra a mis profesores, los que me acogieron en sus aulas y me entregaron su paciencia y la luz necesaria para descubrir mi propio camino. A los que por ese breve lapso de tiempo, fueron mis compañeros de curso y son los protagonistas de esta historia. Con mi gratitud, a los sacerdotes de la Congregación de Santa Cruz que soñaron con una educación justa y comprometida con nuestra historia, y en especial, a los sacerdotes que fueron mis profesores.
Repentinamente… horriblemente… ella se despierta. ¿Qué ha ocurrido? Ha ocurrido algo horrible. No, no ha ocurrido nada. Es sólo el viento que estremece la casa, sacudiendo las ventanas, golpeando un hierro del techo y haciendo temblar su cama. Las hojas pasan aleteando frente a su ventana, alejándose hacia arriba; en la avenida un periódico completo se agita en el aire como una cometa perdida y cae clavándose en un pino. Hace frío. El verano ha terminado… es otoño, todo es feo. Los carros pasan ruidosamente, balanceándose de lado a lado; dos chinos avanzan a pasitos cargados con un balancín de madera del que penden los cestos cargados de verduras… sus coletas y sus blusas azules volando al viento. Un perro blanco de tres patas pasa aullando frente a la cerca. ¡Todo ha terminado! Sigue leyendo →
El Viejo y el Mar», novella en inglés, para nosotros una novela corta, permitió a Hemingway ganar el premio Pulitzer en 1953 y después el Nóbel de Literatura en el 54. En esta obra Hemingway desarrolla una complicada trama en la que demuestra una vez más cuán pequeño es el hombre ante la naturaleza, pero cuán grande es aquel que tiene honor y dignidad para afrontar las dificultades.
EL VIEJO Y EL MAR
(fragmento)
Ernest Hemingway Era un viejo que pescaba solo en un bote en el Gulf Stream y hacía ochenta y cuatro días que no cogía un pez. En los primeros cuarenta días había tenido consigo a un muchacho. Pero después de cuarenta días sin haber pescado, los padres del muchacho le habían dicho que el viejo estaba definitiva y rematadamente salao 1, lo cual era la peor forma de la mala suerte, y por orden de sus padres el muchacho había salido en otro bote que cogió tres buenos peces la primera semana. Entristecía al muchacho ver al viejo regresar todos los días con su bote vacío, y siempre bajaba a ayudarle a cargar los rollos de sedal o el bichero y el arpón y la vela arrollada al mástil. La vela estaba remendada con sacos de harina, y arrollada, parecía una bandera en permanente derrota.
El viejo era flaco y desgarbado, con arrugas profundas en la parte posterior del cuello. Las pardas manchas del benigno cáncer de la piel que el sol produce con sus reflejos en el mar tropical estaban en sus mejillas. Estas pecas corrían por los lados de su cara hasta bastante abajo y sus manos tenían las hondas cicatrices que causa la manipulación de las cuerdas cuando sujetan los grandes peces. Pero ninguna de esas cicatrices era reciente. Eran tan viejas como las erosiones de un árido desierto.
Todo en él era viejo, salvo sus ojos; y estos tenían el mismo color del mar y eran alegres e invictos.
-Santiago -le dijo el muchacho trepando por la orilla desde donde quedaba varado el bote-. Yo podría volver con usted. Hemos hecho algún dinero.
El viejo había enseñado al muchacho a pescar y el muchacho le tenía cariño.
-No -dijo el viejo-. Tú sales en un bote que tiene buena suerte. Sigue con ellos.
-Pero recuerde que una vez llevaba ochenta y siete días sin pescar nada y luego cogimos peces grandes todos los días Sigue leyendo →