La matemática fractal del tiempo y el elusivo fin que se extiende hacia el infinito en una paradójica carrera son representado en la gran narrativa escatológica de nuestros días –en la mítica fecha del 21 de diciembre del 2012
I
Años antes de que se conocieran los primeros ecos sobre los mayas y el fin del mundo, dos hermanos se internaron en el Amazonas: después de meses de tomar Ayahuasca y estudiar el I Ching. Uno de ellos (Terence McKenna) se dio cuenta de que los sesenta y cuatro hexagramas son los elementos de una Tabla Periódica de Elementos temporal, el tiempo (al no haber lineas rectas en la naturaleza, el tiempo no puede ser lineal) está constituido por un número determinado de elementos: en base a ellos y a la Secuencia del Rey Wen, construyó un modelo fractal del tiempo lleno de picos y depresiones que tenía sentido.
Tiene sentido porque los niveles del fractal de la Onda de Tiempo Cero coinciden no sólo con eventos históricos, culturales y naturales de importancia sino también porque corresponden con ciclos astronómicos como la manchas solares o la precesión de los equinoccios, tiene Sigue leyendo