Carta a un amigo


Tienes esa rara habilidad para elegir lo que me gusta, de hurgar en un baúl viejo un montón de palabras y seleccionar la más bella, o aquella que mata el desconsuelo con su sola presencia. Amigo mío tienes ese don que tanto escasea, el estar ahí, siempre ahí, en una esquina de mi mundo con tu jardín templado y con tu profunda existencia. Me gustas porque eres simple dentro de tu inalcanzable existencia, porque me vistes de hermosura aunque este ahí, callada y mustia, transitando quizás que mundos a los que nadie llega. Por que me quieres siempre, no porque este disponible o porque pueda ser hermosa o tal vez como una bruja con cejas negras, no, tu me quieres porque escuchas mis silencios, porque tus manos pueden en un ápice de tiempo, bordarme el rostro de alegrías, porque amas mis palabras, mis silencios…, porque vienes conmigo, sin lugar a dudas, hace tantas existencias.