Me llego a mi misma.
A veces…, Me llego a mi misma a través de mis laberintos y mis caminos todos, van expandiéndose como universos infinitos, hablándome en susurros, envolviéndome como una serpiente mágica que me abriga. A medida que los recorro y reconozco, logro afirmarme en mí misma, cuando me salgo de ellos y me pierdo en el mundo…, me abisma una extraña sensación de soledad, de tal vez, estar en un lugar no propio.